domingo, 4 de agosto de 2013

High School DxD - Vol 3 - Vida 2

Bueno, pues aquí volvemos a la carga con otro capítulo de la tercera novela de High School DxD. En esta veremos aparecer a dos personajes nuevos quedarán que hablar en esta novela (¿o quizá también más adelante?). En cualquier caso, un capítulo potente para compensar los anteriores, que entre epílogos, prólogos y presentaciones, han sido bastante cortitos. Espero que os guste y todo eso~



Vida.2 Aparece la Espada Sagrada.

Parte 1

“¿El proyecto Espada-Sagrada?”

Buchou asintió al oír mis palabras.

“Sí. Yuuto es un superviviente de ese proyecto.”

Asia, Buchou y yo volvimos a casa después de terminar las actividades del club. Buchou y Asia vinieron a mi habitación y Buchou empezó a contarnos cosas sobre Kiba.

“Hace unos cuantos años hubo un proyecto en el seno de la Iglesia Católica que involucró a todos aquellos que eran capaces de blandir la espada sagrada Excalibur.”

“...Es la primera vez que oigo hablar de ello.”

Asia no sabía nada sobre dicho proyecto. Bueno, sonaba normal que un proyecto secreto de este tipo no llegase a oídos de una joven a la que adoraban como una doncella sagrada.

“Las espadas sagradas son el arma definitivo contra los Demonios. Si un Demonio toca una espada sagrada acaba ardiendo él solo. Si fuera cortado por ella, desaparecería sin dejar ni rastro. Podríamos decir que es el arma definitiva de aquellos que creen en Dios y ven a los Demonios como sus enemigos.”

Espadas sagradas... Eran esas cosas que salían en libros, juegos y novelas ligeras, ¿verdad? Yo era un Demonio, así que también me resultaría peligroso cruzarme con una de esas armas.

“Aunque hay multitud de espadas sagradas procedentes de todo el mundo, creo que la más famosa de ellas sería Excalibur. Incuso en Japón aparece en muchos libros. Es un arma sagrada creada mediante la magia y la alquimia por aquellos que alcanzaron las tierras divinas. Pero las espadas sagradas eligen a sus propios portadores. He escuchado que normalmente se elige a un portador cada diez años, o algo así.”

“Kiba tiene un Artefacto Sagrado que puede crear espadas demoniacas, ¿no? ¿No habrá también un Artefacto Sagrado que pueda crear espadas sagradas?”

Esa fue mi pregunta. Era una conclusión simple, ya que si existía un Artefacto que creaba espadas demoniacas bien podría darse el caso contrario.

“No es que pueda afirmar que no exista, pero si pensamos en la cantidad de espadas sagradas existentes carece de cierto sentido. Por supuesto que no estoy diciendo que fuera una habilidad desdeñable. De entre todas las existentes hay un utensilio sagrado que se cataloga como ‘Longinus’(10), al igual que tu ‘Boosted Gear’(11). El más famoso de ellos es el Artefacto Sagrado que portaba el que acabó con Jesucristo, el ‘True Longinus’(12). Se dice que la categoría de ‘Longinus’ se llama así en honor de esa arma.”

Longinus. Eran los Artefactos Sagrados con el poder suficiente para matar al mismísimo Dios. Igual que el que poseía yo en mi brazo izquierdo. Así que existe un utensilio sagrado que es un Artefacto Sagrado y pertenece a dicha clasificación Pero escuchar que la propia lanza que acabó con la vida de Jesús-san también fuera un ‘Longinus’... Estaba desvelando los misterios de la historia como si nada. Hablar con un Demonio de alto nivel podía ser realmente instructivo.

“En cualquier caso, no hay ningún Artefacto Sagrado de tipo divino que pueda competir con Excalibur, Durandal(13) o Ama-no-Murakumo-no-Tsurugi(14), ya que son espadas sagradas excepcionalmente poderosas. Lo mismo pasa con las espadas demoniacas.”

Hmmmm. Había demasiada información de la que no tenía ni idea. Probablemente debería recordar estas cosas, pero últimamente tenía tantas cosas que recordar... Era duro seguir el paso.

“Yuuto recibió un tratamiento artificial para adaptarse al manejo de las espadas sagradas y, en concreto, a Excalibur.”

“¿Entonces Kiba es capaz de utilizar espadas sagradas?”

Buchou negó con la cabeza.

“Yuuto no pudo adaptarse a las espadas sagradas. No sólo Yuuto, parece que todos los que recibieron un tratamiento similar tampoco pudieron...”

Incluso Kiba, que era un experto en el manejo de espadas y podía manejar cualquier espada demoniaca, era incapaz de blandir espadas sagradas.

“La gente de la Iglesia vio a los que no pudieron ser capaces de manejar espadas sagradas como ‘productos defectuosos’ y se deshicieron de ellos.”

Deshacerse... Era una palabra bastante desagradable. Podía imaginarme lo que quería decir eso. La mirada de Buchou cambió porque ella tampoco estaba cómoda con el tema.

“La mayoría de los sujetos del experimento fueron asesinados, incluyendo a Yuuto. Sólo por el hecho de no poder adaptarse al manejo de espadas sagradas...”

“...No puede ser. Ese no es un acto aceptable para aquellos que sirven a Dios.”

Parecía que oír aquello le había supuesto un duro golpe a Asia. Sus ojos dejaban ver algunas lágrimas. Es normal llorar cuando algo en lo que crees sigue traicionándote.

“Ellos, la gente que pertenece a la Iglesia, dice que los Demonios somos existencias malignas. Pero yo creo que las malas intenciones de los humanos son el mayor mal que existe en este mundo.”

Buchou dijo aquello con una mirada triste. Buchou era un Demonio, pero era muy amable. Una vez me dijo que sus sentimientos eran parecidos a los de los humanos porque llevaba mucho tiempo viviendo en este mundo, pero no creo que sea así. Creo que Buchou siempre fue una mujer amable desde el principio. De otro modo no podría explicar su cálida sonrisa. ¡También había gente así incluso entre los Demonios! Y ese era el motivo por el que me enorgullecía de ser uno de ellos.

“Cuando reencarné a Yuuto en Demonio, juró vengarse aunque estaba en un estado crítico. Como utilizaron su talento para intentar que fuera capaz de empuñar espadas sagradas desde que nació, quise que utilizase ese talento como Demonio. La habilidad innata para el manejo de las espadas de Yuuto no debería servir sólo para utilizar espadas sagradas.”

Buchou quiso salvar a Kiba convirtiéndolo en Demonio porque había tenido una vida miserable por culpa de las espadas sagradas. Quería decirle que no tuviera tanta fijación con las espadas sagradas y que utilizase sus poderes al servicio de los Demonios. Pero Kiba...

“No ha sido capaz de olvidarlas. Ni a las espadas sagradas, ni a aquellos que estuvieron involucrados con ellas y la gente de la Iglesia...”

La razón por la que detestaba a los Sacerdotes. La razón por la que estaba obsesionado con todo lo relacionado con las espadas sagradas. Aún no había podido olvidarlo. No, jugaron con su vida y terminaron acabando con ella. No era extraño que ardiera en deseos de venganza. Cuando fui asesinado por aquel Ángel Caído, yo también sentí lo mismo. Si a él le pasó algo parecido desde que era tan pequeño, entonces se odio acumulado hacia ellos tenía que ser enorme. Buchou exhaló un gran suspiro.

“En cualquier caso, de momento sólo le vigilaré. Ahora mismo su mente está repleta de los sentimientos que tiene hacia las espadas sagradas, pero espero que vuelva a la normalidad.”

“Ah, hablando de eso. Creo que fue esta foto la que provocó que actuase así.”

Le di la foto a Buchou. Kiba dijo que la espada que aparecía en aquella foto era una espada sagrada. Creo que, de alguna manera, todo estaba relacionado. Los ojos de Buchou cambiaron en cuanto vio la foto.

“Ise, ¿conoces a alguien que esté relacionado con la Iglesia?”

“No. No conozco a nadie así.”

Eso es lo que me dijeron mis padres. Les había preguntado por si acaso.

“Pero cuando aún era pequeño, parecía que había un chico católico en el barrio.”

“Entonces sí que había alguien cerca de ti... Vaya, así que hace diez años había una espada sagrada en esta zona. Es aterrador.”

“Entonces... ¿esa espada es realmente una espada sagrada?”

“Sí, es una espada sagrada. No es tan poderosa como las que he mencionado antes, pero es para tomárselo en serio. Entonces este hombre debería ser su portador... Ahora lo entiendo. Escuché que mi predecesor en esta zona desapareció, pero todo tiene sentido si esta fue la razón. Pero si no recuerdo mal...”

Oh. Buchou empezó a hablar para sí misma. Parecía haber descubierto algo, pero después de quedarse un rato pensativa dijo...

“Vamos a dormir. Aunque sigamos pensando en ello, eso no ayudará a que Yuuto vuelva a comportarse como siempre.”

Después de decir eso, ¡Buchou empezó a desnudarse!

“¡B-Buchou! ¿¡Por qué te estás quitando la ropa aquí!?”

“¿Que por qué? Ya sabes que no puedo dormir si no estoy desnuda, Ise.”

“¡No, no, no! ¡Eso ya lo sé! Lo que quiero decir es...  ¿¡Por qué te la estás quitando en mi habitación!?”

Estaba mirando ansioso el cuerpo de Buchou mientras empezaba a alterarme. ¡Ngggggg! Daba igual cuantas veces lo viera, ¡tenía un cuerpo increíble! Sus pechos botaron cuando se quitó el sujetador.

“Pues porque voy a dormir contigo.”

Me empezó a chorrear sangre de la nariz.

¡Uoooooooooo! ¡Una chica ha dicho que quiere dormir conmigo!

“¡Entonces yo también dormiré aquí! ¡Yo también quiero dormir con Ise-san!”

¡Oye, oye, oye, oye! ¡Me alegra mucho oírlo, pero no puede ser! ¡No puedes hacer eso, Asia! ¡No deberías andar copiando a Buchou!

“¡Buchou! ¡Estás siendo una mala influencia para Asia! Por favor, ¡ponte la ropa!”

Buchou frunció el ceño cuando me escuchó.

“¿Mala influencia? Eso ha sido de muy mala educación, Ise. Sabes de sobra que duermo desnuda, ¿verdad? Ya hemos dormido juntos muchas veces.”

Esta vez fue Asia la que contestó las palabras de Buchou.

“¿...Que habéis dormido juntos... muchas veces....? No... ¿Ise-san y Buchou-san...?”

Asia empezó a temblar y se notaba que estaba a punto de llorar porque oír aquello fue algo duro para ella. ¡E-Espera...! ¿¡Qué clase de situación es esta!?

“Asia, esta noche las manos fuera de Ise.”

“¡No quiero! Creo que yo también tengo derecho a recibir mimos de Ise-san. ¡Yo también quiero dormir con él!”

¡Asia! ¿¡Tantas ganas tenías de dormir conmigo!? ¡Era un poco complicado, pero me sentía feliz! Aunque tenía los ojos llorosos parecía estar firmemente decidida. Por lo que había dicho sabía que no iba a echarse atrás. ¡Waaaaah! ¡Acababa de empezar una guerra en mi cuarto! ¡No os peleéis! Las dos cruzaron sus miradas y empezaron a salir chispas... Intenté respirar en medio de aquella situación tan incómoda. ¡Era realmente difícil respirar con ese ambiente! ¡En serio!

“Entonces que sea Ise quien decida.”

Buchou me miró. Su mirada me estaba gritando “¡Elígeme a mí!”. ¡Podía sentir como una fuerza salía de sus ojos!

“Ise-san. Dormirás conmigo, ¿verdad?”

Asia me preguntó con los ojos llorosos. Tuve ganas de rendirme ante ella porque no estaba actuando. La que no fuera elegida acabaría guardándome rencor. Me eché las manos a la cabeza y luego la agaché. Era la decisión más difícil que había tomado en la vida.

(10).- Longinus (Longino) era el nombre del soldado romano que clavó su lanza en el costado de Jesucristo, ya en la cruz, causándole la muerte. Sorprendentemente, tras dicho acto reconoció en Jesus al hijo de Dios y acabó siendo canonizado como Santo y Mártir por la propia Iglesia Católica.

(11).- Artefacto Potenciador

(12).- La traducción literal sería ‘Verdadero Longinus’.

(13).- Durandal (Durandarte) era el nombre de la espada de Roldán, paladín de las tropas de Carlomagno, rey de los francos, y que se decía que guardaba varias reliquias sagradas (un diente de San Pedro, sangre de San Basilio, cabellos de San Dionisio, Patrón de Francia, y parte del manto de la Virgen María)

(14).- Es una espada legendaria japonesa, que incluso forma parte de los Tesoros Imperiales de Japón, cuyo nombre literal viene a ser “Espada de la Lluvia de las nubes del cielo”. También es conocida con el nombre de Kusanagi. Se dice que la encontró el Dios Susano’o cuando decapitó una de las cabezas de Yama no Orochi.


Parte 2

“...Fuuuua.”

Respiré profundamente después de beberme un vaso de agua en la cocina.

...Después de todo, conseguí calmar la situación eligiendo dormir con las dos a la vez. Por supuesto después de obligar a Buchou a que se pusiera un pijama por una vez. A este paso, Asia habría acabado imitándola... Parecía que Asia acabaría haciendo cosas eróticas por la influencia de Buchou... Bueno, eso me haría feliz, pero al mismo tiempo me resultaría complicado. Tenía que proteger a Asia, y si la chica a la que tienes que proteger intentaba seducirte... ¡Eso podría ser algo bueno!

Pero también podría ser algo malo... Aaaaghh. Era algo que mi cerebro no era capaz de manejar. En la cama, Buchou y Asia estaban durmiendo conmigo en medio. ¡Es una situación con la que siempre había soñado! ¡Era algo maravilloso! ¡Estaba durmiendo con una chica a cada lado! ¡Esa sería la situación ideal para cualquier chico! Pero si le ponía la mano encima a Buchou, que dormía a mi izquierda, parecía que Asia se enfadaría conmigo; y si le ponía la mano a Asia, que dormía a mi derecha, sería Buchou la que se enfadaría. En ese momento mi lado bueno me dijo que mejor no hiciera nada.

¡Esto me está matando! ¡Maldita sea! ¡Las tenía a mi lado pero no podía hacer nada con ellas! Agaché la cabeza y me la sujeté con las manos mientras lloraba.¡Era incapaz de irme a dormir porque estaba muy excitado de tener dos preciosidades como esas durmiendo a mi lado! ¡Detuve mis deseos de sobarles los pechos y los muslos y escapé escaleras abajo en cuanto vi una oportunidad! Estaba seguro de que las dos seguirían durmiendo tranquilamente.

¡Joder! ¡Me lo quería montar con las dos! ¿¡No es la primera vez en mi vida que soy popular con las chicas!? ¿¡No debería utilizar esta oportunidad para probar muchas cosas!? ¡Quizá podríamos hacer algo erótico los tres juntos! ¿¡Sería posible algo así!? ¡En un harén los tríos son algo normal! ¡He oído que eso es de lo más básico! ¿¡Significa eso que no seré capaz de tener mi propio harén!? Si tuviera talento para ello, ¡ahora mismo estaría disfrutando placenteramente con Asia y con Buchou y las tendría en mis manos! ¡Puta mierda! ¡Había entendido otra dolorosa realidad! ¡No podía hacer nada aunque estuviera durmiendo con dos chicas! Es decir, que aunque quisiera toquetear a Buchou no podía hacerlo. ¡Y no podía permitir que Asia perdiera su pureza! ¿¡Estaba pensando en todo esto por mi inexperiencia!? ¿¡Es porque soy virgen!? ¡Qué estupidez! En las simulaciones que hago en mi cabeza la cosa sería algo así...

“Fufufu. ¿A qué chica debería elegir hoy?”

“¡Ise-sama! ¡Elígeme a mí, por favor! ¡Te lo ruego!”

“¿¡Pero qué dices!? ¡Soy una maldita perra que no puede vivir sin el pene del amo! ¡Elígeme a mí!”

“¡No te pongas en mi camino! ¡Oni-sama! ¡Ya no puedo soportarlo más! ¡Te lo ruego! ¡Por favor, taládrame hasta el fondo!”

“¡Jajajaja! Hey, hey, dadme un respiro. Sólo tengo un cuerpo, ¿vale? ¡Poneos en fila! Así podré elegir tranquilamente en qué orden os atiendo. Jajaja, hay que ver la guerra que me dais.”

En mi cabeza todo iba a la perfección... Pero la realidad era mucho más dura. Una lágrima estaba recorriendo mi mejilla. Después de todo aquello sólo era una alucinación que había formado en mi cabeza. Aaaah, ¿cuando voy a tener mi primera vez? Creo que ya va siendo hora de tener mi primera experiencia con una chica. ¿Eh? ¿Nunca? No puede ser... Ya le he visto pechos muchas veces... sólo me queda un pasito más. Snif... ¿Por qué todo tenía que acabar así...?

Hey, compañero. Perdona que te moleste

¡...! Nunca habría esperado que empezase una conversación conmigo. Era la criatura que residía en mi brazo izquierdo, el Artefacto Sagrado “Boosted Gear”, el Dragón Galés Ddraig. Me habló de repente poco después del Rating Game que disputamos contra los Phenex y me cedió su poder definitivo, el Balance Breaker(15). Gracias a aquello derroté a Riser Phenex y conseguí romper el compromiso de Buchou. Pero tuve que dar mi brazo izquierdo, que se convirtió en el brazo de un dragón. Tal era el precio a pagar por usar ese poder. Ahora mi brazo parecía normal gracias a la ayuda de Buchou y Akeno-san, pero si no recibía tratamiento periódico para reducir el poder del dragón de mi interior, este acabaría volviendo a transformarse en el brazo del dragón.

No habías vuelto a aparecer desde aquel día. ¡Ni siquiera me contestabas cuando te llamaba!

No digas eso. Esta vez no voy a huir. Hablemos un rato.

Me senté en el sofá del salón.

Hmph. Apareces de la nada y encima con exigencias.

Nah, no digas eso.

¿Acaso ya había recargado por completo todo el poder mágico del dragón? Sería esa la razón por la que me estaba hablando de nuevo... Se suponía que mañana Akeno-san drenaría de nuevo mis poderes. Gwfufufu, no podía esperar a que llegase el momento. Era tan excitante... No podía dejar de babear pensando en ello.

Parece que tu cabeza sigue pensando en las mismas cosas de siempre.

Dijo Ddraig mientras suspiraba.

¡Cierra el pico! ¡Estoy en la edad! ¿De qué querías hablarme?

No me importa hablar de mujeres.

¿Eh...? ¿Estabas escuchándome?

Bueno, estoy a tu lado, así que te escucho siempre, quiera o no...

¿Ah, sí? Así que puedes escuchar todo. Y lo que es peor, parece que también podía escuchar mis pensamientos.

Los Gremory y sus sirvientes parecen ser criaturas especialmente afectivas para ser Demonios. Lo mismo ocurre con tus compañeros y tu ama. Especialmente con Rias Gremory. El amor que te tiene es bastante profundo... Parece que te quiere muchísimo.

Sí... No sé por qué, pero parece que me mima muchísimo.

Le contesté mientras me ponía rojo. Era verdad. Últimamente notaba como Buchou estaba mucho más pendiente de mí. Creo que todo esto empezó después de que derrotase a Riser. Incluso delante del resto de miembros del club, que eran todos sus sirvientes, me abrazaba... y hasta me besaba en la mejilla de vez en cuando. Estaba feliz, pero también me daba vergüenza que hiciera eso, así que no sabía qué hacer.

Jujuju. Probablemente estés en la edad en la que deberías experimentar todo ese tipo de cosas. Deberías hacerlo lo antes posible, nunca sabremos cuando puede aparecer el “tío blanco” delante de nuestras narices.

Oye, siempre he querido preguntártelo... ¿Quién es el “tío blanco” ese del que tanto hablas?

El dragón blanco, también conocido como el Dragón Etéreo.

¿D-Dr... Dragón... Etéreo? ¿Tendría alguna relación con Ddraig, el Dragón Galés? Si no recordaba mal, a Ddraig le llamaban “Sekiryutei”(16). Entonces el dragón blanco era... Ddraig me lo dijo directamente mientras yo pensaba en ello.

Sabías que hace tiempo hubo una gran guerra entre tres bandos: Dios y los Ángeles, los Ángeles Caídos y los Demonios, ¿verdad?

Sí.

Aquella vez también hubo quien fue apoyado por otros poderes. Hadas, espíritus, criaturas europeas, youkai(17) y humanos. Los Dragones fuimos los únicos que no tomamos partido por ningún bando.

¿Y eso por qué?

Me pregunto por qué. No sé cual fue la verdadera razón, pero los dragones son criaturas con un poder casi ilimitado y siempre actúan libre y egoístamente. Hubo dragones que apoyaron a los Demonios, así como otros que se aliaron con Dios, pero la mayoría de ellos ignoraron la guerra y vivieron a su libre albedrío.

Vaya, pues si que eran criaturas caprichosas los Dragones. Vivían haciendo lo que querían...

Pero durante la Gran Guerra entre aquellos tres poderes, dos estúpidos Dragones empezaron un combate. Y eran dos de los dragones de más alto nivel, con un poder que podía equipararse al de Dios y Maou(18). Durante su lucha se llevaron por delante a gente de los tres bandos indiscriminadamente. Para ellos, no había nada más problemático que la aparición de aquellos dos dragones. Mientras ellos desarrollaban una guerra para intentar hacerse con el control del mundo, dos dragones irrumpieron de repente en el campo de batalla sin preocuparse más que de ellos mismos.

¡Esos dos eran lo peor! ¡Si que eran problemáticos los dragones!

¿Por qué luchaban esos dos?

Ni idea. Es como si no les interesase nada más. Probablemente aquellos dos dragones ni siquiera podrían recordar por qué comenzaron su lucha. Por primera vez, los líderes de los tres bandos unieron sus fuerzas. “¡Tenemos que librarnos de esos dos dragones o nuestra guerra no tendrá ningún sentido!” Algo por el estilo.

Los bandos que eran enemigos formando una alianza... Todo por culpa de una lucha entre dragones, parecía una situación bastante complicada.

Los dos dragones enloquecieron cuando interrumpieron su pelea. “¡No oséis interponeros en nuestro combate!” “¡Un simple Dios y unos Maou no deberían interrumpir un duelo entre dragones!” –respondieron aquellos idiotas. Fueron directamente a por Dios, Maou y los líderes de los Ángeles Caídos y trataron de comérselos. Bueno, aquello fue un error por su parte, supongo.

En serio, esos dos dragones eran definitivamente lo peor. Pero ya lo pillaba. Así que aquellos dragones eran...

Al final los dos dragones fueron hechos pedazos y sus espíritus fueron sellados en cuerpos humanos como Artefactos Sagrados. Los dos dragones fueron sellados en humanos a los que usaron como sus avatares y se encontraron numerosas veces, continuando así su combate. Cada vez, uno de ellos gana y el otro muere, aunque también ha habido casos en que uno de ellos ha muerto antes de que el otro apareciera, evitando así la lucha. Pero la mayoría de las veces si se encuentran. Si el humano que sirve como recipiente para el Dragón muere, el ciclo se detiene por un tiempo y sus espíritus vagan por el mundo hasta que nazcan humanos con poder mágico de dragón. Ese ciclo se ha estado repitiendo durante muchísimos años.

Y esos dos dragones erais tú y el Dragón Etéreo.

Sí, exacto. Esta vez tú has sido elegido como mi recipiente. Y te has acabado convirtiendo en un Demonio. En todos estos años, ha sido la primera vez que ocurre algo así. Por eso tengo tantas ganas de que llegue el momento. Me pregunto qué es lo que pasará esta vez.

Oye, oye, que me has poseído sin mi permiso, así que no tengas tanta prisa por ver lo que va a pasar con mi vida. Aunque quizá sería buena idea expresarle cual era mi sueño. Me aclaré la garganta y grité lo más alto que pude para mí mismo.

¡Escucha, Ddraig! ¡Quiero ser promocionado para convertirme en un Demonio de nivel alto y convertirme en el Rey del Harén! ¡Mi sueño es formar un ejército de preciosidades convirtiéndolas en mis sirvientes personales!

Ddraig se quedó sin palabras unos segundos y luego empezó a reírse.

¡Jajajaja! También es la primera vez que tengo un recipiente como tú. La mayoría de mis recipientes estaban demasiado orgullosos o demasiado asustados de nuestros poderes, y ninguno de ellos vivió una vida decente.

¿Eh? ¿Entonces soy anormal? ¿Tan raro soy?

Eres raro, pero no digo que seas anormal. En cualquier caso, en tu cuerpo reside un dragón. Da igual en qué época y lugar estés, un Dragón siempre representa el poder. ¿Sabías que hay multitud de dibujos y esculturas de dragones, representados de una u otra forma, en muchísimos países diferentes? A lo largo de los siglos, los humanos han admirado a los dragones, los han respetado y los han temido. Sin darse cuenta, los Dragones han fascinado siempre a todos los que les rodeaban. También aquellos con poder se reúnen alrededor de los Dragones tarde o temprano. Si alguien se acerca a ti, sea para admirarte o para desafiarte, probablemente se deba al poder del dragón.

Suena como un poder que sería mejor no tener. Entonces, ¿muchos van a fijarme como un objetivo a derrotar?

Luchar contra enemigos duros que son atraídos por tu poder. Ese es el camino de aquel que posea al Emperador de los Dragones. Pero no tienes por qué desanimarte, también atraerá a las chicas.

¿En serio?

Sí, en serio. Todos mis anteriores poseedores siempre han atraído al género opuesto. Creo que es lo que llamaríais “ser popular”, ¿no? No tenían que preocuparse por ganarse la atención del sexo opuesto para nada.

E-Entonces... ¿Ha habido gente que haya tenido s-s... se... sexo con una chica?

Había uno que cada noche yacía con una chica diferente.

¿¡Q-Queeeeé!? ¿Uno de mis anteriores senpai había hecho ese tipo de cosas? ¡Era increíble! ¡Maravilloso! ¡Yuuuujuuuuuu! ¡Grité de alegría por dentro! ¡Era increíble! ¡Era la leche!

Uoooooo... Lo dices en serio... Tú... No, usted, señor, ¿es un Artefacto Sagrado tan maravilloso?

Incliné la cabeza y le hablé con respeto. Quiero decir, no sabía que mi Artefacto Sagrado fuera un objeto tan increíble. Conocer esa información se convirtió en una nueva fuente de esperanza para mí.

...Y ahora, de repente me tratas con respeto... Sin duda, es la primera vez que tengo un recipiente que cambia tanto de opinión como tú.

¿¡De qué está hablando, Dragón-sensei!? ¡No estoy en una posición que me permita dirigirme groseramente hacia su persona! Aaah sensei, ¡de ahora en adelante estaré bajo su cuidado!

En serio, eres alguien bastante difícil de entender. Pero definitivamente esto se va a poner interesante. Bueno, entonces no dejemos que el Dragón Etéreo acabe con nosotros.

Bien dicho. Por cierto, ¿tan fuerte es ese Dragón Etéreo?

Claro que es fuerte. De inicio, nuestros poderes podían ser capaces de dominar a Dios y a Maou. Es sólo que nos maldijeron y nos convirtieron en Artefactos Sagrados. Estamos en una situación en la que nos es muy complicado liberar por completo nuestros poderes. Aún así, si te acabas acostumbrando, los Demonios y Ángeles de nivel alto no podrán hacer nada contra nosotros.

Ya lo pillaba. Así que si el chico que poseía al Dragón Etéreo y yo conseguíamos dominar el manejo de nuestros Artefactos Sagrados podríamos volvernos increíblemente poderosos. Pero a decir verdad, no tenía ningún interés en derrotar a Dios o a Maou. Aunque podría estar bien convertirme en Maou y dedicarme a reunir chicas... Tenía cierta animadversión por los Ángeles Caídos, pero tampoco tenía ningún interés en enfrentarme a sus líderes. Pero entonces... ¿acabaría encontrándome con el poseedor del Dragón Etéreo quiera o no? ¿Quién será su poseedor actual? Es obvio que sería alguien a quien no conozco, pero esperaba que fuera una chica. ¡Pensaba vivir mi vida al máximo, sin lamentar haber sido arrastrado por el destino de los dos Dragones! ¡Pensaba mejorar tanto que no podría perder contra ese Dragón Etéreo!

En cualquier caso, mi objetivo actual son los pechos de Buchou. Oppai...

¿Vas a tocárselos?

No, voy a chupárselos.

.....................

Se lo dije bien clarito. No sé por qué, pero el Emperador de las Dragones se quedó callado. ¿Se había quedado sin habla? Seguí hablando sin darle importancia.

La sensación de los pechotes de Buchou... Aún puedo sentirla en mis manos. ¡Si tuviera la oportunidad, me gustaría estar sobándoselos todo el día! Quizá podría concedérmelo como premio por ser su sirviente. ¡Pero eso no es suficiente! ¡Los chicos siempre deben apuntar más alto! ¡Los que se contentan con sobetear unos pechos generosos no son más que meros pervertidos de tercera! ¡Por eso es por lo que voy a chupárselos!

¡.........! ¿Eso quieres? Bueno, pues esfuérzate al máximo.

Ddraig parecía sorprendido por mis palabras. Pero lo decía completamente en serio, Emperador de los Dragones.

Ddraig, ¡necesitaré que me prestes tus poderes!

Así que necesitas mi ayuda para chuparle las tetas a una mujer, eh...Parece que he caído bastante bajo, pero puede ser divertido. A veces está bien tener un compañero como tú.

Parecía que había accedido a colaborar, aunque al final se le escapó un suspiro. Parece que a veces me ve como un bicho raro o algo.

¡Bien! ¡Trabajemos juntos en ello, compañero!

Sí, tienes razón, compañero.

Y así, el Emperador de los Dragones y yo sellamos con una promesa nuestro objetivo en plena medianoche.

(15).- Rompe equilibrios.

(16).- Dragón Emperador Rojo.

(17).- Youkai es un término empleado para referirse a apariciones, espíritus, demonios... de la cultura asiática que tienen parte de animal y parte humana. Su naturaleza es variada, por lo que no se les puede encasillar como grupo.

(18).- Emperador Oscuro.


Parte 3

Dispersar el poder mágico del dragón.

Esto consiste en anular mi poder haciendo que sea asimilado por Demonios de alto nivel. Había un par de formas distintas de hacer esto, pero la más sencilla y la que más garantías ofrecía era tomarlo directamente de la persona en cuestión. La manera en la que se hacía eso... bueno, la verdad es que era bastante estimulante para un estudiante pervertido como yo. Las únicas que podían hacerme eso eran Buchou y Akeno-san. Las dos se turnaban para ir extrayéndome mis poderes de dragón. Hoy habíamos quedado para que me extrajeran el poder del dragón que ya se acumulaba en mi interior y estaba en una habitación del segundo piso del edificio de la antigua escuela que era usada por Akeno-san. Solía ser un aula, pero ahora el suelo estaba cubierto por un tatami y estaba decorada como una habitación tradicional japonesa. Había símbolos grabados por todos lados que parecían hechizos y también había objetos empleados para la invocación. Estaba esperando en medio de la habitación con mi torso al descubierto. Había un círculo mágico en el lugar donde estaba sentado. Escuché que era algo necesario para poder hacer el ritual. También era necesario para realizar el ritual que tuviera que ir con el torso desnudo. La puerta se abrió y alguien entró en la habitación. Esa persona era Akeno-san, que iba cubierta por una tela blanca. No llevaba su habitual coleta. Lo pensaba siempre que hacíamos el ritual, pero Akeno-san estaba increíblemente atractiva con el pelo suelto. Me sonrió y se sentó delante de mí de forma ceremoniosa.

“Los preparativos ya están listos. Ahora, empecemos.”

Um... ummmmmm... ¿Akeno-san...? ¡La tela blanca que cubría el cuerpo de Akeno-san estaba empapada! ¡Su largo pelo negro también se estaba pegando a la tela y se veía sexy! ¡Hasta podía ver su piel! ¡Si seguía así iba a verle todo y “algo” en mí iba a cambiar...! ¡Joder! ¡Que se lo estoy viendo! ¡Que se le transparenta todo! ¡Le estoy viendo los pechos! ¡Hasta puedo verle los pezones! Espera... ¿por qué no lleva puesto el sujetador?

“Vaya, vaya. ¿Ha pasado algo? De repente te has quedado muy calladito... ¿Pasa algo con lo que llevo puesto? Está empapado porque he tenido que mojarme para hacer el ritual. ¿Te parece mal?”

Akeno-san empezó a darse palmaditas en el pecho a propósito. Eso provocó cierta respuesta en mi entrepierna...

“¡No, no! ¡Te queda genial!”

No podía evitar mirar los pechos de Akeno-san. Es que verlos transparentados a través de aquella tela era demasiado estimulante para mí... ¿Eh? ¿Era yo o tampoco llevaba nada ahí abajo? Entonces empecé a mirarle las caderas... Me quedé sin palabras. No llevaba nada.... creo. ¡Ella no mostraba timidez alguna y no intentaba esconderlo! ¡Más bien parecía disfrutar con mi reacción!

“Vamos a empezar. Ise-kun, por favor, déjame tu brazo izquierdo.”

“¡S-Sí...! ¡Quedo a tu cargo!”

La manera de dispersar el poder del dragón. Consistía en...

“Voy a chupar la energía directamente a través de tus dedos mientras la concentras en tu brazo izquierdo, Ise-kun. Así, tu brazo volverá temporalmente a su estado original.”

Sí. El ritual se completaba succionando la energía directamente a través del cuerpo. En mi caso en concreto, Buchou y Akeno-san absorbían mi poder a través de mis dedos.

CHUP...

Con un sonido bastante sugerente, Akeno-san se metió mi dedo índice en la boca.

¡......! ........Ufff. Es una sensación que no puede describirse con palabras. Ya había pensado en ello muchas veces, ¡pero era una sensación increíble estar dentro de la boca de una chica! Notaba como estaba mojada, pero también era cálida, y sus labios eran tan suaves... Además, cuando me chupaban el dedo sonaba “chu-chu”... ¡Ese ruidito me ponía muchísimo! ¡Se sentía increíblemente bien! ¡Aaaaah! ¡En mi cabeza todo empezaba a estar de color rosa! ¡Impresionante! ¡Esto era demasiado! ¡Esto era algo que superaba cualquier cosa que hubiera visto en cualquier video porno!

CHUP-CHUP-CHURU

Mientras me chupaba el dedo, Akeno-san estaba haciendo esos ruiditos a propósito. ¡Era como si disfrutase con mis reacciones! Mientras tanto, yo sólo podía estremecerme ligeramente con la cara completamente roja y dejar que mi cuerpo disfrutase de la sensación. Aaaah, iba a grabar estos momentos en mi memoria por el resto de mi vida. ¡Espera! Ahora que lo pensaba, ¿¡iban a tener que seguir haciéndome esto toda la vida!? ¡Uoooooooooo! ¡Esto es lo mejor! ¡Sin duda! ¡No habría podido experimentar esto si mi brazo no se hubiera convertido en el brazo de un dragón! ¡Ddraig! ¡Ahora mismo estaba en el mejor momento de mi vida! Era una situación erótica, no cabe duda, pero notaba como el poder que había reunido en mi brazo izquierdo iba desapareciendo. También notaba como mi brazo pesaba menos y cada vez estaba más relajado. Sentía como la presencia de Ddraig estaba desvaneciéndose poco a poco. ¿Entonces tenía razón al pensar que Ddraig se manifestaba cuando la cantidad de poder del dragón que almacenaba ya era importante? Ahora que lo pensaba...

CHUP.

“Uffff.”

Accidentalmente dejé escapar un gemido. ¡Es que Akeno-san de repente se puso a lamerme el dedo! ¡Empezó a rodearlo con la punta de su lengua! ¡E-Espera... Akeno-san! Cuando miré, Akeno-san tenía cara de haberse puesto juguetona. Parecía que su personalidad sádica había empezado a ponerse al mando. Mi dedo salió de su boca dejando un hilo de la saliva de Akeno-san. ¡Uffffff! ¡Era demasiado erótico!

“Vaya, vaya. Si pones una carita tan mona como esa haces que me den ganas de darte algo más.”

“¿Al... algo más?”

“Sí. Tampoco creo que sea nada malo mimar un poco a mi Kouhai.”

Entonces Akeno-san empezó a chuparme el dedo otra vez mientras acercaba más y más su cuerpo al mío. ¿¡Eeeeeeeeeh!? ¿¡A-Akeno-san...!? ¡Espera un momento! ¿¡Qué está pasando aquí!? Ignorando mi confusión, ¡sonrió y me abrazó! ¡Podía percibir el olor de su sedoso pelo negro! No, ¡era la fragancia del cuerpo de Akeno-san lo que estaba haciendo que mi masculinidad se sacudiera incontrolablemente! Como no llevaba camiseta y Akeno-san llevaba sólo esa fina tela encima, ¡podía sentir su cuerpo directamente sobre el mío! Estaba frío porque la tela estaba mojada, ¡pero también podía notar la calidez de su cuerpo! ¡Era una situación tan erótica que estaba a punto de perder la cabeza! ¡E-El cuerpo de Akeno-san era tan suave! ¡Podía sentir el tacto de sus pechos a través de la tela!

¡BUHAA!

¡Me empezó a sangrar la nariz! ¡Pues claro! Pero aunque me saliera a chorro, ¡no pensaba parar! Akeno-san me susurró al oído mientras yo estaba más tieso que una vela.

“Aunque actúe así, lo cierto es que te tengo un gran cariño, Ise-kun.”

“¿A... mí?”

“Sí. Al principio pensé en ti como un kouhai guapete. Pero últimamente es diferente. Desde la lucha contra los Phenex. Vi desde la enfermería como te levantabas una y otra vez, sin importar cuantas veces te hicieran caer.”

Aaaaah, es verdad. Si no recordaba mal, Akeno-san fue retirada durante el combate y fue enviada a la enfermería para que atendieran sus heridas.

“Y luego fuiste a la fiesta para salvar a Buchou. Hasta derrotaste a Riser, del que se decía que era inmortal. Hasta yo me pongo caliente al ver a un hombre luchando de una manera tan maravillosa como esa.”

“¿C-Caliente...?”

Akeno-san me miró a los ojos y se rió.

“Ufu. A veces cuando pienso en ti noto como algo caliente me recorre todo el pecho. Y no puedo hacer nada para evitarlo. Pero cuando trato de hacerte disfrutar de algo como esto, me sale el instinto juguetón... ¿Será esto a lo que llaman amor?”

¿¡Que si es amor!? Eh... ¿¡Está abusando de mí!? ¿¡Es esto acoso sexual!? ¡El mundo es un lugar realmente maravilloso...!

“Pero si te pongo las manos encima, Rias se va a enfadar. Esa chica... realmente te tiene en estima... Ufufuf, eres un hombre pecaminoso, Ise-kun.”

... ¿Pecaminoso? ¿Yo? ¡Recibiré cualquier castigo que me quieran imponer, pero vamos a seguir con esta situación! ¿Eh? ¿Akeno-san ha llamado “Rias” a Buchou? ¿Se llamarán por sus nombres cuando están a solas? Akeno-san y Buchou parecen conocerse de mucho más tiempo que el resto de miembros del club.

Entonces, Akeno-san me rodeó el cuello con los brazos. ¡Lo hizo para dejar expuesto a propósito su cuerpo! ¡Pude verle directamente el pezón rosadito de su teta derecha! ¡Lo vi claramente! ¡Incluso estaba enseñándome casi todas sus piernas!

“¿Quieres tener un affair(19) conmigo?”

“¿¡U-Un affair...!?”

¿¡Un affair con quien!? No sabía que significaba “affair, pero ¡sólo con la palabra ya me estaba poniendo!

“Ufufufu. No diré nada de lo que pase aquí a Buchou ni a Asia-chan. Excitante, ¿verdad? Será nuestro secreto.”

PLIC PLIC PLIC PLIC

Mi nariz parecía que no iba a dejar de sangrar; aún me estaba goteando sangre.

“También quiero experimentar esto al menos una vez. Ser devorado por un hombre más joven cargado de lujuria. También tengo una parte masoquista. Creo que ya va siendo hora de sentir a un hombre dentro de mí de una vez por todas.”

P-Por favor... Como sigas diciéndome esas cosas al final... ¿Eh? ¿“Ya va siendo hora”...? Significa eso que...

“Akeno-san, ¿no serás...?”

“Sí, soy virgen. Ufufu. Ise-kun ya tendrá más experiencia que yo, así que estaré feliz si eres tú el que me domina.”

“N-No... yo tampoco... tengo experiencia.”

Akeno-san se quedó confundida cuando escuchó mi confesión.

“¿Eh? Si que es una sorpresa. Pensaba que tú y Buchou ya...”

“¡No, no! ¡No hemos hecho nada! Ni siquiera sé si está bien que yo sea su primera experiencia.”

“Vaya, vaya. ¿Así que Buchou se lo está tomando con calma? ¿Y no lo has hecho con Asia-chan?”

“¡Eso es aún más imposible!”

No podía ponerle las manos encima a esas dos. Y si hablábamos de Asia en concreto, era algo totalmente diferente. Asia era una chica a la que tenía que proteger, así que ponerle las manos encima sería algo imperdonable... Eso es algo que ya había decidido por mí mismo.

“Siendo Ise-kun pensaba que Buchou te daría un ‘premio especial’ todas las noches... Esto si que es una sorpresa.”

Eeeem... ¿A qué se refiere con eso de “premio especial”? ¿¡Es algo que aliviaría todos los deseos sexuales de cualquier chico en esta edad!?

“Ise-kun. ¿No quieres hacerlo con ninguna de las dos?”

“¡Pues claro que quiero! ¡Por supuesto que sí! ¡Estoy haciendo lo que puedo para reprimir las ganas que tengo de hacerlo con ellas! ¡Pero luego no puedo dar el último paso y acabo llorando todas las noches! ¡También quiero montármelo con las dos a la vez!”

¡Aaaaah, al final acabé por contarle mis verdaderos sentimientos! Pero era lo que pensaba, honestamente. ¡No podía evitarse que un chico de mi edad tuviera un gran deseo sexual reprimido cuando estaba rodeado de chicas guapas por todos lados!

“Pobrecito... Vaya, vaya. Entonces parece que los dos sois bastante lentos para estas cosas... Estoy seguro de que podríais hacerlo si realmente os lo propusierais... Bueno, entonces parece que no puedo arrebatarte tu pureza sin su permiso.”

... Mierda. ¿Estaba a punto de llevarse mi virginidad? ¿He dicho algo innecesario? ¿Me graduaré algún día de la escuela de la virginidad? ¡Espera! ¡Un momento! ¿He dicho alguna tontería?

De repente la puerta se abrió. Cuando miré hacia ella... vi a Buchou dirigiéndonos una mirada furiosa.

“Akeno. ¿Qué significa todo esto?”

Buchou se acercó hacia nosotros con una voz desagradable... Mierda... Está cabreada de verdad...

“Ufufu. Sólo estaba con el ritual para dispersar el poder mágico del dragón.”

Akeno-san contestó despreocupadamente. Tenía la misma sonrisa que siempre.

“¿Sólo era eso...? Pues lo mires como lo mires... ¿no estaríais intentando hacer algo más?”

“Vaya, vaya. Ni siquiera se me ocurriría.”

“Aunque así fuera, hay unos límites. Ni siquiera yo he...”

“¿Y no será porque te lo estás tomando con mucha calma? Leer libros está bien, pero no todo va a ir siempre tan fluido como está ahí escrito.”

“................”

“...............”

No se estaban mirando fijamente, pero Buchou y Akeno-san se estaban mirando a los ojos. De algún modo podía sentir la intensidad del choque. U-Ummm... No sé cómo describir esta situación. Me puse rápidamente la camiseta y traté de no acercarme demasiado a las dos. Entonces Buchou me miró y me pellizcó la mejilla. ¡Ouch!

“Ise, parece que te estabas divirtiendo mucho. ¿Has conseguido acercarte a Akeno-onee-sama a la que tanto admiras?”

“N-N... No, yo...”

No podía hablar bien porque aún me estaba pellizcando la mejilla. Pero poner excusas no era algo que haría un hombre, así que me quedé en silencio. Hasta yo había sido arrastrado por aquella situación; me esperaba que pasase algo así.

“¡Entonces haz lo que quieras!”

Buchou puso cara de enfado y salió de la habitación.

¡BLAM!

Hasta la manera en la que cerró la puerta fue violenta. Snif... Buchou me había gritado. ¿Por qué? ¿Era porque había estado haciendo algunas travesuras con Akeno-san? Akeno-san se acercó mientras estaba confuso y me susurró al oído.

“¿Eso no eran celos? Es un encanto. Ufufufu. Ise-kun, parece que estáis haciendo progresos en vuestra relación.”

¿Qué quería decir? Hmmmmmmm. No entendía a qué se refería con esos de hacer progresos. ¿Pensaba que Akeno-san y yo habíamos...? Soy el sirviente de Buchou, así que no hay manera de que permita que pase algo así con Akeno-san... Pero sí que pensé que Buchou estaba preciosa cuando se enfadaba, igual que Asia.

(19).- Romance, aventura sentimental...


Parte 4

Asia y yo íbamos de camino a casa después de haber dado por concluidas las actividades del club. Normalmente Buchou venía con nosotros, pero hoy no era así. Parece que el incidente con Akeno-san era la causa.

“Buchou, ¿no vienes a casa?”

“Iré después. Marchaos sin mí.”

Le pregunté en la misma sala del club, pero no es sólo que no me mirase a los ojos, es que ni siquiera levantó la vista. Noté como si hubiera espinas en cada una de sus palabras. Snif... ¿ahora Buchou me odia? Estoy triste... ¿Así es como se sentían los perros cuando sus dueños les regañaban? Me sentía tan solo y tan... triste...

“¿No va a venir Buchou a casa con nosotros?”

“¿Hm? Bueno, verás... parece que Buchou se ha enfadado conmigo...”

“¿Has hecho algo?”

Asia me preguntó con voz de preocupación, pero no podía contarle lo que paso con Akeno-san. Eso sólo haría que las cosas se complicasen aún más.

“No, pero es culpa mía. Me disculparé con ella más tarde. No te preocupes por nada, Asia.”

“... Vale. Pero quizá sea por mi culpa. Últimamente he estado contestando mucho a Buchou...”

Asia lo dijo como si quisiera disculparse. Asia veía a Buchou como su rival, pero no creo que esta vez sea por eso. La causa era, sin duda, lo que pasó entre Akeno-san y yo...

“No es eso. No creo que esté enfadada contigo, Asia. Es mi culpa.”

Bueno, era un pervertido. Pero creía que Buchou no tenía ningún problema con ese tema. Ni siquiera me decía nada cuando comentaba que mi objetivo era crear mi propio harén.

Rara. Buchou últimamente estaba un poco rara. ¿O es que querrá a sus sirvientes sólo para ella? ¿Será igual que esas personas que se molestan cuando sus mascotas son acariciadas por otras personas? Aunque Buchou me mimase mucho, a fin de cuentas sólo era un sirviente para ella. Snif... Si me estaba preocupando tanto por una chica es que aún estaba lejos de alcanzar mi sueño de tener mi propio harén. ¡Mierda! ¿¡Tendrá esto alguna relación con la razón por la que no era popular con las chicas!? ¡El corazón de una mujer era tan complicado! ¡Si no era capaz de entender este tipo de cosas nunca podría hacer nada contra los tíos guapos! Estuve pensando en ese tipo de cosas hasta que llegamos a casa. Cuando fui a abrir la puerta, noté que algo no iba bien.

Escalofríos...

¿Qué era eso? Era la misma sensación que tenía cuando mi cuerpo quería advertirme de un peligro. Ya había sentido algo así antes. Recuerdo que fue cuando me crucé con Asia por primera vez y la llevé hasta la Iglesia. Cuando estuvo a la vista, noté como mi cuerpo se estremecía.

GRIP.

Asia me sujetó con sus manos temblorosas. Parecía que Asia también tenía la misma sensación desagradable. Era una sensación que sólo podían percibir los Demonios. Había alguien en mi casa. No, no puede ser... ¡Mamá! Me imaginé a mi madre en peligro y abrí la puerta rápidamente. ¡Me quité los zapatos y me dirigí directo a la cocina!  ¡Tenía que ser una broma! ¡Mamá! ¡No puede ser! ¿Alguien sabe que soy un Demonio? ¿Pero quién? ¿Los Ángeles Caídos? ¿Dios? ¿Los Ángeles? ¿Gente de la Iglesia? ¡Todos ellos eran peligrosos! ¡Eran capaces de acabar con nosotros y con cualquiera que tuviera relación con nosotros sin piedad! En mi cabeza recordaba el estado del cuerpo del hombre que fue asesinado por aquel maldito Sacerdote, Freed. El cadáver estaba completamente mutilado. ¿¡Iba a acabar mi madre igual que aquel tío!? ¡Mierda! ¡No me jodas! Ese tipo de cosas... ¡Eso no iba a suceder!

Mamá no estaba en la cocina, pero la escuché reírse en el salón. Me dirigí rápidamente hacia allí y vi dos caras desconocidas y a mi madre, que estaba riéndose.

“Y esta es una foto de Ise cuando iba a primaria. Mira. Esta foto es de cuando se le rompió el bañador en la piscina. Siempre estaba dando problemas. Se metió en la piscina con esas pintas.”

“¿M... Mamá?”

Mamá me miró en cuanto se dio cuenta de que estaba allí.

“Oh Ise, ya has vuelto. ¿Ha pasado algo? Estás un poco pálido.”

“Hauuuuuuu. Estoy tan contenta.”

Asia se sintió tan aliviada que se quedó sentada en el suelo. Después de comprobar que mi madre estaba a salvo, respiré profundamente para tranquilizarme un poco. Pero aún no pude librarme de la sensación de desasosiego que tenía. Estaba claro que era debido a las dos desconocidas. Las dos eran extranjeras y llevaban un rosario colgando del pecho. Las dos parecían ser de mi edad. Una de ellas tenía el pelo castaño y la otra tenía el pelo de color azul con un mechón verde y unos ojos que daban miedo. Las dos eran bastante guapas. Pero por el modo en que se comportaron, hasta yo podía decir que no eran dos chicas normales. Las dos llevaban un hábito blanco. ¿Estaban relacionadas con la Iglesia? ¿Serían exorcistas? ¿Estábamos en peligro? No podría luchar en un sitio como este.

“Hola, Hyoudou Issei-kun.”

La chica de pelo castaño me sonrió. A su lado estaba la chica del mechón verde y un arma cubierta por una tela. Era aquello. Podía sentir como la sensación de peligro emanaba de aquella arma. Podía sentir una sensación desagradable en toda mi piel. Probablemente fue creada para destruir a los Demonios.

“Encantado de conocerte.”

La saludé con una sonrisa falsa, pero sus ojos cambiaron y parecía aturdida.

“¿Eh? ¿No me recuerdas? ¡Soy yo!”

....... ¿Eh? La chica castaña se estaba señalando a sí misma. No, no. No te recuerdo. Mamá me dio una foto porque estaba confundido. Era la foto en la que salía aquella espada sagrada. Mamá señaló al chico del que era amigo cuando era pequeño.

“Es esta chica. Shidou Irina-chan. En aquel entonces parecía un chico, pero ahora ya está hecha toda una mujer. Hasta yo me sorprendí.”

¿Perdona...? Esta chica... ¿¡es el chico que vivía en el barrio cuando era pequeño y con el que solía salir a jugar!? ¿¡Eeeeeeeeeh!? ¿El chico de la foto... era una chica? ¿No era un chico?

“Cuanto tiempo sin vernos, Ise-kun. ¿Tú también pensabas que era un chico? Bueno, supongo que es normal. Como siempre estaba por ahí creando problemas como los chicos... Pero parece que las cosas han cambiado en todo este tiempo en el que nos hemos sabido nada el uno del otro. En serio, uno nunca puede saber qué se va a encontrar en este tipo de encuentros.”

Sus palabras parecían querer decir algo. Sí, ella ya había descubierto mi verdadera identidad.


Parte 5

“Me alegra ver que los dos estáis a salvo.”

Asia y yo fuimos abrazados por Buchou.

Irina y la otra chica se fueron de casa después de estar una media hora charlando. Tenía que volver a Japón después de tanto tiempo precisamente ahora. Al parecer volvió porque esta fue la ciudad en la que se crió cuando era pequeña. Dijo que tuvo que irse a Inglaterra por el trabajo de sus padres, pero sabía que la realidad es que sus padres estaban relacionados con la Iglesia. Asia y yo tratamos de no involucrarnos demasiado con ellas y dejamos que fuera mi madre la que llevase la conversación. Especialmente Asia no quería tener ningún contacto con nadie perteneciente a la Iglesia. La mandé a que fuera a por algo a su habitación y le dije que se quedase allí. Estaba preparado para luchar si las cosas se ponían feas... pero por suerte no pasó nada. Después de aquello, Buchou volvió a casa. Igual que nos pasó a nosotros, cuando entró estaba pálida. Después de confirmar que Asia y yo estábamos a salvo, nos abrazó a los dos de repente.

“¿Estáis heridos? Creo que ya saben que somos Demonios, pero parece que no han querido montar un espectáculo en un área residencial, y encima delante de tu madre, que es una humana normal.”

“Ise-san y yo estamos bien, Buchou-san.”

“Aaaah, Ise. Me alegro... Si algo os hubiera pasado a ti y a Asia, yo...  Después de las actividades del club, Souna me pidió que me reuniera con ella. Me contó que había gente perteneciente a la Iglesia en la ciudad. También me dijo que tenían una espada sagrada.”

Así que Buchou vino más tarde a casa porque estuvo hablando con Kaichou. Cuando se estaba acercando a casa se dio cuenta de que algo no iba bien y vino corriendo. Buchou nos confesó que se temía lo peor cuando entró en casa y notó los restos de un poder sagrado muy poderoso. Parecía que se le iba a salir el corazón del pecho.

“Pensé que les podía haber pasado lo peor a mis queridos sirvientes. Me preparé para encontrarme lo peor, ¿sabéis...? Si hubiera tenido que afrontar un adiós así después de haber tenido una discusión... me habría arrepentido hasta el día de mi muerte. Lo siento. Tenía que haberos tratado a los dos con la importancia que os merecéis...”

[“Los Gremory y sus sirvientes parecen ser criaturas especialmente afectivas para ser Demonios”]

Recordé lo que me dijo Ddraig la noche anterior. Yo también pensaba lo mismo. Buchou suspiró aliviada y dejó caer una lágrima después de comprobar que estábamos a salvo. Tenía que haberse preocupado un montón por nosotros. Tenía que pasar esto justo después de haber tenido un pequeño desencuentro con Asia y haberse enfadado tanto conmigo. Los dos pensábamos que Buchou estaba enfadada con nosotros. Buchou parecía estar también preocupada por ello.

“Buchou-san. Yo también siento haberte contestado así. Pensé que Buchou-san querría apartar a Ise de mi lado... Pensé que no podía ganar...”

Asia se disculpó. Buchou sonrió y le dio una palmadita en la cabeza a Asia.

“No pasa nada.”

Entonces Buchou nos abrazó cariñosamente. Aaaah, podía sentir el amor de Buchou. Qui... quizá accediera a alguna petición indecente...

“Buchou, oppai.”

“Sí, ya lo sé Ise. En serio, no tienes remedio...”

“No.”

Asia me separó de Buchou. Nggggh, era una buena baza. Buchou suspiró y siguió hablando después de que los tres ya nos hubiésemos tranquilizado.

“Según lo que me dijo Souna, se encontró a las dos esta tarde y la dijeron que querían negociar conmigo, Rias Gremory, ya que esta ciudad era parte de mi territorio.”

“¿La gente de la Iglesia quiere negociar con un Demonio?”

Buchou asintió a mi pregunta. Esto era extraño. Los Demonios y los cristianos eran enemigos. Y la propuesta de negociación venía de ellos, eh...

“¿Entonces quieren llegar a algún acuerdo? ¿O es algún tipo de petición?”

“... No estoy segura de lo que están planeando, pero tienen previsto venir a la sede del club mañana por la tarde, después de las clases. Al parecer juraron ante Dios que no nos iban a atacar.”

“¿Podemos creerles?”

“Tenemos que hacerlo. Tenemos que confiar en su fe, dado que son creyentes en Dios que vienen a pedir algo a los Demonios, cuando se supone que a sus ojos somos criaturas malvadas. Parecen que están bajo presión y es cierto que eso es un problema. Tengo un mal presentimiento sobre todo esto... Por lo que cuentan, los Sacerdotes de esta ciudad han empezado a aparecer asesinados.”

La mirada de Buchou se volvió más agresiva y era cierto que su expresión era completamente seria. La verdad es que daba miedo... Incluso ese puto Sacerdote loco, Freed, que estaba aliado con los Ángeles Caídos, nos detestaba. Si uno era un verdadero creyente en Dios, supongo que a sus ojos seremos aún peores. Algo importante iba a pasar. Incluso yo, que era un novato en este “mundo”, podía sentirlo.


Parte 6

El día siguiente después de clase.

Nosotros, los miembros del grupo de los Gremory, nos reunimos en la sala del club. En el sofá estaban sentadas Buchou, Akeno-san y las dos invitadas. Los demás miembros, incluido yo, estábamos sentados en un rincón, escuchando la conversación. Desde que aquellas dos entraron allí, no podíamos evitar sentirnos incómodos. Nuestros instintos demoníacos nos estaban advirtiendo de que estábamos en peligro. Buchou y Akeno-san hablaban con ellas seriamente. Pero el que más me asustaba de todos era Kiba. Estaba mirándolas con un tremendo rencor. Si pasara algo... No. Las miraba como si estuviera a punto de atacarlas en cualquier momento. Las dos eran creyentes del Dios al que Kiba tanto odiaba. Si conocías su pasado, entonces sabrías por qué ahora estaba rebosante de odio. En aquella atmósfera, la primera en hablar fue Shidou Irina.

“Recientemente, las espadas sagradas Excalibur que estaban custodiadas en el Cuartel General de la Iglesia Católica del Vaticano, la Iglesia Protestante y la Iglesia Ortodoxa, fueron robadas.”

¿Que robaron a Excalibur? ¿Y eso de católica, protestante y...? Si no recordaba mal, me enseñaron que había diversas facciones en la religión cristiana. Pero, ¿cómo podrían robar a Excalibur de la Iglesia Católica, la Protestante y la Ortodoxa? Debería estar en una de ellas, ¿no?

“Excalibur en sí no existe.”

La que respondió mi duda finalmente fue Buchou. Vaya, parece que Buchou puede leerme los pensamientos...

“Lo siento. Uno de mis sirvientes se ha convertido recientemente en Demonio. ¿Podríamos continuar la conversación explicando lo relativo a Excalibur?”

Shidou Irina asintió, aceptando la petición de Buchou.

“Ise-kun, Excalibur se rompió en una guerra  hace mucho tiempo.”

Irina me miró y me dijo eso. ¿Eh? ¿Se rompió? ¿Una espada sagrada? ¿Aún siendo una espada tan famosa?

“Ahora tiene esta apariencia.”

La mujer de pelo azul con el mechón verde cogió su arma, que estaba cubierta por una tela, y me la reveló. Lo que apareció fue una espada larga.

“Esta es Excalibur.”

BRRRR.

En el momento en el que la miré, noté como si se erizasen todos los pelos de mi cuerpo y algo increíblemente frío me recorriera la espalda. Miedo. Escalofríos. Temor. Me quedé aterrado sólo con ver aquella espada. Esto era peligroso. Realmente peligroso. ¡Hasta yo era capaz de saber que cualquier Demonio que tocase esa espada moriría en el instante! ¿Así que esto era una espada sagrada? ¿Esta es el arma más poderosa para exterminar Demonios?

“Excalibur se quebró en pedazos hace mucho tiempo. Los fragmentos se recogieron y se les dio una nueva forma mediante la alquimia. Se dividió en siete espadas. Esta es una de ellas.”

Entonces Excalibur ya no existía como una única espada, pero se crearon otras en su lugar.

“Esta espada que porto es la ‘Excalibur Destruction’(20). Es una de las siete espadas resultantes que fueron creadas y está bajo el control de la Iglesia Católica.”

La mujer del mechón guardó su espada y volvió a envolverla con aquella tela. Si mirabas con atención podían verse hechizos grabados en ella. ¿Entonces normalmente la llevaba sellada? Aún así, no quitaba el hecho de que fuera peligrosa. Irina también sacó algo. Parecía una cuerda larga, pero empezó a moverse como si estuviera viva.

¡....! La cuerda cambió de forma en mi cara y se transformó en una katana.

“La mía es ‘Excalibur Mimic’(21). Puedo cambiar su forma en lo que quiera, que es bastante útil para poder llevarla siempre encima. Al igual que estas, cada ‘Excalibur’ tiene su propia habilidad única. La mía está bajo el control de la Iglesia Protestante.”

Lo dijo con orgullo. También sentía un temor irracional ante esa Excalibur. Sin duda, era muy peligrosa para los Demonios.

“Irina... No hay razón para contarles a estos Demonios las habilidades de nuestras espadas, ¿me equivoco?”

“Pero Xenovia. Aunque sean Demonios tenemos que formar una relación basada en la confianza por la situación en la que nos encontramos. Además, aunque haya revelado la habilidad de mi espada, ni todos los Demonios aquí presentes serían capaces de derrotarme.”

Shidou Irina lo dijo muy confiada. Probablemente tenía la confianza de que no perdería aunque atacásemos todos a la vez. Pero pensar que teníamos delante de nosotros dos espadas sagradas legendarias... ¡Vaya! ¿¡No era una situación muy seria para nosotros!? Entonces me fijé en una presencia que tenía al lado.

Era Kiba. Estaba mirando a ambas espadas y a las dos mujeres con una cara que no le había visto poner nunca. Era verdad... Kiba guardaba un profundo odio contra Excalibur. Yo ni siquiera habría soñado con ver a Excalibur en un lugar como este. Kiba probablemente tampoco lo habría pensado nunca, pero ahora las tenía justo delante de él. Tenía que estar a punto de explotar. Cálmate. Ni se te ocurra atacarlas. Buchou está hablando de negocios con el enemigo. ¡Como se te ocurra hacer alguna estupidez ahora todo habrá sido en vano! En el peor de los casos, incluso acabaríamos empezando un combate, y era imposible que no sufriéramos ninguna baja enfrentándonos a dos Excalibur a la vez.

“¿Y qué tiene que ver el robo de las Excalibur con esta ciudad situada en el extremo oriental del mundo?”

Buchou siguió hablando con la misma actitud. Como podía esperarse de ella. ¡No se arrugaba aunque tuviera a Excalibur delante! ¡Estaba defendiendo su territorio! La chica del pelo azul con el mechón verde y los ojos aterradores – creo que se llamaba Xenovia – fue la que continuó la conversación.

La Iglesia Católica está en posesión de dos Excalibur, contando la mía. La Iglesia Protestante también tiene dos, igual que la Ortodoxa. La espada restante se perdió en la anterior guerra entre Dios, los Demonios y los Ángeles Caídos. Han robado una espada de cada una de las Iglesias, y los que lo hicieron las han traído a Japón, en concreto a esta ciudad.”

Vaya, vaya... Así que hay ladrones de espadas sagradas viviendo en esta ciudad, ¿eh? Buchou se puso la mano en la frente y tomó aliento.

“Parece que mi territorio siempre está lleno de problemas. ¿Y quiénes son los que han robado las Excalibur?”

“Ha sido Grigori.”

Buchou abrió los ojos sorprendida por esa respuesta.

“¿Las espadas sagradas fueron robadas por la organización de los Ángeles Caídos? No es algo en lo que podamos permitirnos equivocaciones. Pero es cierto que deberían ser ellos los que están tras el robo. Para los Demonios, las espadas sagradas no nos son de mucho interés.”

“Sabemos quien es el principal responsable del robo de las Excalibur. Uno de los líderes de Grigori, Kokabiel.”

“Kokabiel... Uno de los líderes de los Ángeles Caídos que sobrevivió a la pasada Guerra... Nunca había esperado escuchar el nombre de alguien mencionado en la Biblia.”

Buchou sonrió al escuchar ese nombre. Espera, ¿uno de los líderes de los Ángeles Caídos? No era sólo que Excalibur estuviera en la ciudad, ¿sino que también estaba un líder de los Ángeles Caídos? ¿E-Entonces para qué han venido aquí? ¿Quieren que les ayudemos...?

“Enviamos a Sacerdotes Exorcistas a esta ciudad en secreto, pero fueron atrapados y asesinados.” Dijo Xenovia.

¿En serio? ¿Estaban sucediendo ese tipo de incidentes violentos sin que nos diéramos cuenta de ello...? ¿Entonces esto era una petición de colaboración? ¿Han venido a pedirle ayuda al Demonio de alto nivel que estaba a cargo de este territorio? Pero lo que dijeron las dos mujeres echaron mis suposiciones por tierra.

“Nuestra petición... No, nuestra orden es que no haya ningún Demonio involucrado en la guerra que libraremos contra los Ángeles Caídos por el control de las Excalibur. En otras palabras, hemos venido a deciros que no interfiráis en este incidente.”

La mirada de Buchou cambió después de escuchar el modo en que habló Xenovia.

“Vaya falta de modales. ¿Pensáis que podríamos colaborar con los Ángeles Caídos? ¿Quizá podríamos formar una alianza con ellos y hacer algo con Excalibur?”

“En el Cuartel General no pensaron que fuera completamente imposible.”

La mirada de Buchou echaba chispas. ¡Estaba realmente enfadada! Un enemigo recorre todo ese camino para venir a su territorio y le dice que ni se le ocurra intervenir en el asunto. Y además de decir lo que les da la gana, dicen que no nos perdonarían si formásemos alianza con los Ángeles Caídos. El orgullo de Buchou como Demonio de clase alta no podía permitirle quedarse callada ante todo esto.

“Los Altos Mandos no confían ni en los Demonios ni en los Ángeles Caídos. Nuestras órdenes nos fueron dadas como si pensaran que para vosotros también fuera positivo que la Iglesia perdiera parte de sus espadas sagradas. Los Ángeles Caídos también sacarían provecho de ello. Por estos motivos, no sería tan descabellado que pensarais en formar una alianza. Por eso hemos venido a advertiros. Si os aliáis con Kokabiel, os eliminaremos por completo, aunque seas la hermana pequeña de Maou.”

Xenovia lo dijo sin prestarle atención a la mirada que le estaba echando Buchou.

“... Si sabes que soy la hermana de Maou debes tener muchos contactos con los Altos Cargos de la Iglesia. Entonces te diré lo siguiente: No formaremos ninguna alianza con los Ángeles Caídos. Nunca, en nombre de la Casa de los Gremory. ¡Jamás haré nada que pueda manchar el nombre de nuestro Maou!”

Parece que era una conclusión satisfactoria para ambas partes, pero Xenovia se rió.

“Ju, me alegra oír eso. Tenía que advertiros por si el mismo Kokabiel se está escondiendo en esta ciudad con tres Excalibur. Si pasase algo luego sería yo la que acabaría ganándose el odio del Cuartel General de la Iglesia. Bueno, no os solicitaremos colaboración. Si formases una alianza con Dios, aunque fuera temporal, podría afectar al equilibrio entre las tres facciones. Especialmente contando con que eres la hermana pequeña de Maou.”

Después de escuchar a Xenovia, Buchou relajó su expresión y respiró profundamente. Nggggggh. Habían estado hablando de tantas cosas complicadas que me había perdido hacía un rato.

“¿Dónde está el enviado de la Iglesia Ortodoxa?”

Xenovia contestó a la pregunta que hizo Buchou.

“Han decidido quedarse al margen de este caso. Su plan es proteger la última Excalibur en el caso de que Irina y yo fracasemos.”

“¿Entonces estáis sólo vosotras dos? ¿Pensáis recuperar las Excalibur de manos de uno de los líderes de los Ángeles Caídos las dos solas? Qué imprudencia. ¿Estáis intentando que os maten?”

Buchou lo dijo con voz sorprendida, pero Shidou Irina y Xenovia respondieron firmemente.

“Sí.”

“Opino igual que Irina, aunque si es posible me gustaría sobrevivir.”

“... ¿Habéis venido hasta Japón preparadas para morir? La fe en vuestras creencias es extrema, como de costumbre...”

“No hables así de nuestras creencias, Rias Gremory. ¿Verdad, Xenovia?”

“Sí. Además, la Iglesia ha decidido que es mejor acabar con todas las Excalibur ante que permitir que caigan en manos de los Ángeles Caídos. Nuestro objetivo es al menos conseguir arrebatarles las Excalibur a los Ángeles Caídos. Si cumplimos eso, nos da igual morir. La única manera de enfrentarse a una Excalibur es con otra Excalibur.”

¡Qué determinación! ¿En eso consistían sus creencias? Impresionante, aunque no lo entendía en absoluto. ¿Tantas ganas tenían de morir por Dios?

“¿Tenéis alguna posibilidad siendo sólo vosotras dos?”

“Bueno, no moriremos en vano.”

Xenovia contestó imperturbable a la pregunta de Buchou.

“Pareces confiada. ¿Tenéis algún arma secreta?”

“Quizá. Lo dejaré a tu imaginación.”

“.............”

“............”

Después de eso, las dos dejaron de hablar y se quedaron mirándose la una a la otra. Shidou Irina y Xenovia se miraron entre ellas y se levantaron.

“Entonces nos marchamos ya. Vamos, Irina.”

“¿No vais a acabaros el té? Podemos prepararos algo de comer.”

“No hace falta.”

Xenovia declinó la oferta de Buchou.

“Lo siento. Nos vamos.”

Shidou Irina también se disculpó gesticulando con su mano. Ni siquiera trataron de aceptar la oferta de Buchou. Cuando se dirigían hacia la puerta, las dos miraron en la misma dirección. Era donde estaba Asia.

“Cuando te vi en casa de Hyoudou Issei pensé que podrías ser tú. ¿Eres la bruja Asia Argento? Nunca habría esperado encontrarte en un lugar como este.”

Dijo Xenovia. El cuerpo de Asia empezó a temblar cuando escuchó que la llamaban “bruja”. Parecía que ser llamada de esa forma le resultaba doloroso a Asia. Irina también parecía haberse dado cuenta y miraba fijamente a Asia.

“¿Entonces eres tú la bruja de la que tanto hablan? ¿La antigua ‘Doncella Sagrada’? Se decía que tenías el poder de curar también a Demonios y Ángeles Caídos, ¿verdad? Escuché que te habían enviado a algún lado después de que te exiliaran, pero nunca pensé que habrías acabado convirtiéndote en un Demonio.”

“.......Ummmmmmm.... Yo.... Yo....”

Asia no sabía como reaccionar ante Irina y Xenovia.

“No pasa nada. No le diré a los Altos Cargos lo que hemos visto aquí, así que estate tranquila. Además, sería demasiado impactante para todos aquellos que estuvieron en contacto con la ‘Doncella Sagrada’ Asia.”

“..........................”

Asia se quedó perpleja tras escuchar a Irina.

“Pero convertirte en un Demonio... Justo a la que llamaban la ‘Doncella Sagrada’. Has caído muy bajo. ¿Aún crees en Dios?”

“Xenovia. No es posible que alguien que se ha convertido en Demonio siga creyendo en Dios.”

Shidou Irina lo dijo con cara de estar sorprendida.

“No, puedo oler sus creencias desde aquí. Puede que sea algo muy difícil de explicar, pero suelo ser bastante sensible a estas cosas. Hay gente que traiciona nuestras enseñanzas y aún así cargan con la culpa por no ser capaz de olvidarlas por completo. Puedo sentir algo así en ella.”

Xenovia lo dijo mientras miraba penetrantemente a Asia. Irina la miraba con cara de interés.

“¿Es eso cierto? Asia-san, ¿aún crees en Dios aunque te hayas convertido en un Demonio?”

Asia contestó con tristeza.

“No es algo que pueda dejarse de lado. He creído en él toda mi vida...”

Al escucharlo, Xenovia sacó su espada de la tela que la cubría y apuntó a Asia con ella.

“Así que es eso. Entonces podríamos acabar contigo en un instante. Si quieres, puedo ponerle fin a esto en nombre de Dios. Aunque hayas pecado, nuestro Dios te perdonará.”

¡........! No podía dejar de sentir algo que me ardía por dentro. Xenovia se aproximó a Asia. Yo me puse delante de ella para protegerla.

“Ni se te ocurra tocarla.”

Le dije claramente a Xenovia.

“Si te acercas a Asia no te lo perdonaré jamás. Antes la llamaste bruja, ¿verdad?”

“Sí, eso hice. Ahora mismo le pega bastante que la llamen así.”

¿¡S-Será zorra...!? Me mordí el labio e hice un ruido con los dientes por culpa de la rabia que sentía hacia ella.

“¡No me jodas! ¡Nadie la ayudó cuando estaba en problemas! ¡Los que no sean capaces de apreciar la bondad de Asia son unos malditos idiotas! ¡Tampoco hubo nadie que quisiera ser amigo de ella!”

“¿Crees que la ‘Doncella Sagrada’ necesitaba amigos? Lo importante era la caridad hacia el prójimo. Las ‘Doncellas Sagradas’ dejan de serlo cuando buscan la amistad y el amor en los demás. Debería haber continuado viviendo sólo gracias al amor de Dios. Así que Asia Argento nunca tuvo el derecho de considerarse una de ellas en ningún momento.”

Xenovia lo dijo como si resultase algo obvio. ¡Joder! ¿¡De qué coño van estas tías!? ¡No podía entenderlas! ¡No quería entenderlas! ¿¡Cómo podía decirlo como si Asia fuera la mala!?

“¿Así que la convertisteis egoístamente en una ‘Doncella Sagrada’ y luego la abandonasteis porque no era lo que esperabais de ella? Eso es una hijoputada... vaya que lo es.”

No podía callarme todo lo que sentía dentro de mí. Siempre... Siempre había querido decirles esto a los que estaban relacionados con la Iglesia y con Dios.

“¡Ninguno de vosotros sabe por lo que tuvo que pasar! ¿¡Qué Dios!? ¿¡Qué amor!? ¡¡Ese Dios vuestro no hizo una puta mierda cuando ella estaba en peligro!!”

Pero Xenovia respondió tranquilamente.

“Dios la amaba. Si no sucedió nada entonces es que su fe no era lo suficientemente fuerte o bien era falsa.”

¿Todos los de la Iglesia eran así? ¿Asia vivía rodeada de este tipo de gente? No me jodas.... ¡No me jodas!

“¿Qué eres tú para Asia?”

“Su familia. Su amigo. Su compañero. Por eso siempre ayudaré a Asia. ¡La protegeré! Si intentas ponerle la mano encima, os convertiréis todos en mis enemigos.”

Xenovia me miró agresivamente al escuchar mi provocación.

“¿Es esto una declaración de guerra... contra toda la Iglesia? Es demasiado viniendo de un simple Demonio. Gremory, creo que no le has educado lo suficiente.”

“Ise, dete...”

Buchou intentó detenerme, pero Kiba se puso delante de mí.

“Me parece un buen momento. Yo seré tu oponente.”

Kiba llevaba su espada y emanaba una intensa aura en la que se percibía el ansia de sangre que tenía.

“¿Quién eres tú?”

Kiba sonrió al escuchar la pregunta de Xenovia.

“Soy tu senpai, aunque parece ser que fui un fracaso.”

En un instante, la habitación del club fue invadida por una cantidad ingente de espadas demoniacas.

(20).- ‘Excalibur destructora’

(21).- ‘Excalibur mimética’


Parte 7

Hmmmmmm. ¿Cómo ha acabado todo de esta manera?

Estaba en el mismo sitio en el que estuvimos practicando para el Torneo de la Pelota del instituto. Kiba estaba a mi lado, aunque un poco retirado. Shidou Irina y Xenovia estaban enfrente de nosotros. Rodeando todo el campo, había una barrera que emanaba un aura roja. Los demás miembros del club nos estaban mirando desde el otro lado de la barrera mágica.

“Entonces, empecemos.”

Irina y Xenovia se quitaron sus hábitos blancos y dejaron ver unas ropas negras preparadas para combatir con ellas. No enseñaban nada de su piel, pero aún así era.... bastante erótico... Podían verse las curvas de sus cuerpos. Ummmmmm, ¡las dos tenían buenas curvas y unas caderas bien prietas! Xenovia retiró la tela que envolvía su espada y liberó su Excalibur. Irina hizo que la suya adoptase la forma de una katana.

Os explicaré como acabó así todo esto.

Estaba discutiendo con las dos enviadas de la Iglesia cuando Kiba intervino y todo se puso peor. Buchou parecía temer que la situación se le escapase de las manos porque a fin de cuentas habíamos sido nosotros, sus sirvientes, quienes empezamos todo esto. Entonces Xenovia nos hizo una propuesta.

“Podría ser interesante comprobar en persona la fuerza de los sirvientes de Rias Gremory. Además, tengo interés por conocer la fuerza de nuestro auto-proclamado senpai.”

Xenovia aceptó el reto de Kiba. También nos dijo que este combate no sería notificado a la Iglesia. Al parecer entendían ligeramente nuestra posición, así que no pusieron pegas a que no fuera un combate a vida o muerte. El lugar sería el mismo en el que estuvimos entrenando béisbol hacía poco, cerca del edificio de la antigua escuela. Para evitar daños innecesarios y evitar que nos detectasen, Akeno-san preparó una barrera para nosotros. Así podríamos luchar un poco más despreocupados. Y yo también formaba parte del combate... ¿Por qué? ¿Acaso este combate es la prórroga de la discusión que tuvimos? Era absurdo... Estaba realmente cabreado por lo que dijeron de Asia, pero nunca pensé que todo acabase en un combate como este. Además, ya estaba a punto de parar cuando Buchou fue a intentar detenerme... Todo acabó así por la intervención de Kiba en la discusión...

“¡Aunque sólo sea un combate de entrenamiento, tened cuidado con las espadas sagradas!”

Escuché las advertencias de Buchou.

“¡S-Sí!”

Contesté mientras no para de temblar recordando el vídeo de “La amenaza de las espadas sagradas” que vimos antes del combate. Parecía ser un registro de combates entre portadores de espadas sagradas y Demonios de nivel alto. Todo Demonio cortado por las espadas sagradas veía como empezaba a salirle humo de la herida. ¿Y sabéis el momento ese en el que el Demonio desaparece? Sí, justo como suena. Desaparece. Cualquier Demonio que resultase herido por una de las espadas sagradas, sería eliminado sin dejar rastro. Su cuerpo simplemente desaparecía. Aterrador. ¡Realmente aterrador! ¡No quería que me alcanzasen con una de esas! Por su parte, Kiba ya había activado su Artefacto Sagrado y tenía muchas espadas demoniacas a su alrededor.

“¿Te parece divertido...?”

Kiba se estaba riendo tanto que daba una impresión muy extraña. Era una de esas risas que hace que el ambiente se quede bajo cero. No había ni rastro de la sonrisa amable que solía tener siempre. Tanto...  ¿Tanto odias a Excalibur...?

“Sí. Justo lo que quería destruir va y aparece justo delante de mis narices. Estoy feliz. Fufufu. Ya había oído que el poder tiende a reunirse siempre en torno a la figura de los Dragones, pero que haya pasado esto tan rápido...”

Ddraig me dijo algo parecido. Dijo que había muchas cosas que serían atraídas por el poder del dragón. Entonces, ¿todo esto era culpa mía... y de Ddraig? No, no podía ser...

“.... ‘Sword Birth’(22), ¿eh? Permite a su poseedor crear cualquier espada demoniaca que pueda imaginar. Es único entre los Artefactos Sagrados relacionados con los poderes demoníacos... Escuché que hubo un sujeto que evitó la muerte después de que los del ‘Proyecto Espada Sagrada’ se librasen de él.... ¿Ese eres tú?”

Kiba no contestó a la pregunta de Xenovia. Simplemente dirigió hacia ella todo su deseo de matar. Hey, hey, Kiba. Que eso estaba prohibido, ¿vale? Por favor, espero que te acuerdes de que esto es un simple combate de práctica. Como se nos vaya de las manos, ¿no afectaría esto a las relaciones entre Dios y los Demonios? También le supondría un problema a Maou Sirzechs-sama.

“Hyoudou Issei-kun.”

La que estaba frente a mí era Shidou Irina, la chica de pelo castaño. Pensaba que era un chico cuando era pequeña, pero ahora estaba claro que era una chica, lo mirase como lo mirase. Apenas recuerdo la época en la que solíamos jugar juntos, pero ahora era una tía buena y además tenía un cuerpazo... Era mi tipo...

“Cuando me encontré con el chico al que llevaba tanto tiempo sin ver y descubrí que se había convertido en un Demonio... menudo shock.”

Parecía realmente deprimida. Bueno, yo tampoco había pensado que me convertiría en un Demonio, pero estaba disfrutando mucho de mi vida actual.

“Ummmmmmm, Shidou Irina... ¿Puedo llamarte Irina? ¿Realmente tenemos que pelear? Ya he dicho que quería que tuvierais cuidado con lo que decíais de Asia. No creo que tengamos que combatir.”

Esa era mi opinión. Había muchas cosas que quería decirles a aquellos relacionados con la Iglesia sobre la situación de Asia. Una parte de mí se sintió realmente aliviada después de decir lo que dije. Bueno, si hubieran seguido diciendo cosas malas de ella, entonces si que habría luchado con ellas sin dudarlo. No pensaba permitir que nadie hablase mal de mi familia. Pero Irina me miró con cara de lástima. Más bien, tenía una lágrima recorriendo su mejilla.

“Es una lástima, Hyoudou Issei-kun. No, te llamaré Ise-kun, ya que nos conocemos desde hace tanto tiempo. ¡Qué trampa nos ha preparado el destino! Me fui a Inglaterra porque descubrí que era capaz de usar las espadas sagradas y pensé que podría ser uno de los representantes de Dios. Aaaaah, ¡esto tiene que ser una prueba que Dios me ha impuesto! ¡La tierra a que llevaba tanto tiempo sin pisar! ¡Un duro destino en el que mi amigo de la infancia se había convertido en un Demonio! ¡El paso del tiempo ha jugado con nosotros! ¡Pero me sobrepondré a cualquier prueba y convertiré a todos a la creencia en el Dios verdadero! ¡Vamos, Ise-kun! ¡Te juzgaré con la ayuda de mi Excalibur! ¡Amen!”

Aunque Irina estaba llorando mientras hablaba, parecía impaciente por empezar el combate y me apuntó con su espada. ¿Eh? ¿¡Eeeeeeeh!? ¡N-No entendía nada de lo que está diciendo esta tía! ¡Ooooh! ¡Sus ojos brillaban como dos luceros! ¿Se había emborrachado con sus propias creencias? ¿Estaba disfrutando de esta situación? ¡Vaya! ¿¡Era de ese tipo de chicas con el que nunca deberías mezclarte!?

“En realidad no entiendo nada de lo que dices, pero... ¡Actívate, ‘Boosted Gear’!”

¡BOOST!

Con un brillo rojo, el guantelete apareció en mi brazo izquierdo. También hacía el mismo sonido cada vez que incrementaba mi poder. Mi Artefacto Sagrado tenía la habilidad de duplicar mi poder cada diez segundos. También me era posible emplear dicho poder para transferírselo a algo o a alguien. Sólo tenía que activar mi Artefacto Sagrado de antemano. Si la chica hacía algo antes de que pudiera activarlo, entonces no sería capaz de hacer nada. Irina y Xenovia parecieron sorprenderse al ver mi Artefacto Sagrado.

“..... Un ‘Longinus’...”

“¿Es ese el ‘Boosted Gear’? Nunca me habría imaginado que me encontraría con el poseedor del Dragón Galés en un país tan lejano como este...”

Dijeron las dos mientras levantaban sus cejas de la sorpresa.

“¡Vas a hacerte daño como le prestes atención sólo a Ise-kun!”

¡CLASH!

Kiba avanzó y le lanzó una estocada a Xenovia. La espada sagrada y la espada demoniaca chocaron, creando chispas. Xenovia sonrió después de bloquear el ataque de Kiba.

“El ‘Sword Birth’ y el ‘Boosted Gear’. Y también el ‘Twilight Healing’ de Asia Argento. Todos esos artefactos son una herejía para nosotras. Quizá era normal que acabaseis convirtiéndoos en Demonios.”

“¡Mi poder también es el del odio de todos mis compañeros que fueron asesinados sin piedad! ¡Derrotaré a todos los portadores de Excalibur con este poder! ¡Acabaré con todos!”

Así que Kiba juró vengarse por todos los que fueron dejados de lado como sujetos de prueba y fueron asesinados en aquel proyecto...

“¡Aquí voy, Ise-kun!”

Irina se acercó corriendo hacia mí lanzando cortes con su katana. ¡Que eso es peligroso! ¡Quiere cortarme de verdad! Como me alcance con eso el daño sería crítico, ¿no? Un golpe directo sería un problema. ¡Directamente sería mi fin!

“¡Aún no he terminado!”

Continuaba aumentando mi poder mientras evitaba los envites de su katana.

¡¡BOOST!!

Noté como el poder se expandía por mi cuerpo. Ahora mi poder había vuelto a duplicarse, pero parecía que aún no era suficiente para poder combatir con ella. ¿Cuánto debería esperar? ¡Mierda! ¡Casi no tenía experiencia y ya estaba teniendo mi primer combate ante una espada sagrada! De momento me centraría en evitar sus acometidas, ¡ya atacaría después de haber aumentado mi poder tanto como fuera posible! ¡Si las cosas se ponían feas, tendría que utilizarlo! ¡Si no, no podría quedarme tranquilo! No... ¡Sería un desperdicio no utilizarlo en este combate! ¡Usaría mi ‘Dress Breaker’(23) si veía la oportunidad! Era una de mis técnicas definitivas. Tenía el poder de hacer desaparecer la ropa de cualquier mujer utilizando el poder mágico obtenido gracias al Boosted Gear. Irina me miró como si sospechase algo.

“... Estás poniendo cara de pervertido. ¿Qué estás tramando?”

Fufufu, pronto te veré como tu madre te trajo al mundo.

“Por favor, ten cuidado... Ise-senpai tiene el poder de hacer desaparecer la ropa de las mujeres que toca.”

¿¡Koneko-chan!? ¿¡Por qué le estás revelando mis técnicas al enemigo!? Koneko-chan lo dijo mientras me miraba con ojos delatores.

“Enemigo de las mujeres... Eres lo peor...”

“¡Aaaaah! ¡Esas son unas palabras muy duras, Koneko-chan!”

“¡Qué técnica más rastrera! Aaah, Dios. Por favor, ¡perdona a este pervertido pecador!”

Dijo Irina con cara de tristeza mientras rezaba.

“¡No me mires con esa mirada lastimera!”

“Eres lo peor...”

Lo siento Koneko-chan. ¡Lamento mucho ser un pervertido!

“¡Ise-saan! ¡Si tantas ganas tenías de ver el cuerpo de una mujer tendrías que habérmelo dicho...! ¡No me importaría sacrificar mi cuerpo por Ise-san!”

¡El autosacrificio! ¡Justo como era de esperar de una antigua cristiana, Asia-san! ¿Pero no estás diciendo algo muy atrevido así, de repente?

“Ya veo. Ese deseo sexual tan acentuado...  creo que es algo normal para un Demonio lujurioso.”

Dijo Xenovia mientras suspiraba y me miraba con desprecio.

“Lo siento.”

No sé por qué, pero Kiba se disculpó con ella. ¡¡No tienes de qué disculparte, imbécil!! ¿Por qué era el único al que trataban así? Kiba creó otra espada demoniaca en el sitio y la empuñó. Ahora tenía dos espadas y volvió a atacar a Xenovia.

“¡Ahora volvamos a lo nuestro! ¡Arde y congela! ¡’Flare Brand’ y ‘Freeze Mist’(24)!”

Una de sus espadas demoniacas creó un torbellino de fuego y la otra levantó una ventisca helada. Kiba era un ‘Caballo’, y su habilidad especial era su velocidad. Estaba atacando a una velocidad increíble, pero Xenovia estaba esquivando sus ataques sin apenas tener que moverse.

“El rápido desplazamiento de los ‘Caballos’, espadas de hielo y fuego... ¡Pero eres demasiado inocente!”

¡KLING!

Con un simple movimiento, Xenovia convirtió en polvo las espadas de Kiba.

“¡...........!”

Kiba se quedó sin palabras al ver cómo sus espadas fueron destruidas con un simple ataque. ¡Menudo poder destructivo! ¡Así que eso era una espada sagrada!

“Mi espada posee una habilidad destructiva ilimitada. No hay nada que no pueda destruir.”

Xenovia hizo ondear su espada y apuntó con ella hacia el cielo para después clavarla en el suelo.

¡¡DOOOOOOOOOOOOOOOON!!

¡De repente, el lugar en el que estaba empezó a temblar! Perdí el equilibrio y tuve que apoyar la rodilla en el suelo. ¡No podía quedarme en pie! ¡Una nube de polvo envolvía todo a mi alrededor! ¡Hasta había tierra cayéndome encima! ¡Agh! ¡Qué asco! Me quité toda la suciedad de la cara mientras escupía la tierra que se me había metido en la boca.

¡......! No podía creer lo que vieron mis ojos cuando vi cómo había quedado el campo de entrenamiento. ¿¡Un cráter!? ¡Había un agujero tremendo en el lugar en el que Xenovia clavó su espada! ¿¡No me digas que ha hecho todo esto con un simple golpe!? ¿¡Sólo con un movimiento de su espada!? Cuando Xenovia clavó su espada en el suelo no parecía que hubiera empleado tanto poder.

“Esta es mi Excalibur. Puede destruir cualquier cosa que se interponga en su camino. No la llaman ‘Excalibur’ gratuitamente.”

...... “Excalibur Destruction”. ¡Así que su poder de destrucción estaba a un nivel diferente al resto! ¡Aunque no hubieran sido las espadas demoniacas de Kiba, también habrían sido destruidas! Kiba puso una mirada glacial cuando vio aquello.

“.... Menudo poder destructivo para algo que ni siquiera es la Excalibur real. Parece que destruir las siete espadas va a ser un desafío complicado.”

Sus ojos aún no habían perdido ese halo de rencor que tenían últimamente. ¡Kiba pretendía destruir las siete Excalibur cuando sólo una de ellas ya tenía tal poder! Creo que destruirlas iba a ser muy complicado, incluso para Kiba. En serio, me estaba poniendo malo de ver que en el mundo había tanta gente que era más poderosa que nosotros.

¡¡BOOST!!

¡Era el tercer incremento!

“¡Jooooo! ¡Estoy llena de porquería por tu culpa, Xenovia!”

Irina se sacudió la tierra que cubría su ropa mientras protestaba.

“Pero... ¡ya es hora de acabar con esto!”

¡Me apuntó con la espada y corrió hacia mí! ¡Era increíblemente rápida! ¡Redujo la distancia que nos separaba en un instante! ¡Aunque no era tan rápida como Kiba, sin duda era mucho más rápida que yo! ¿Qué debería hacer? ¿Debería parar mi Boosted Gear y empezar a atacar ya? Aunque no me atacase con la intención de matarme, si seguía esquivando sus ataques lo único que conseguiría era quedarme sin resistencia. Al menos aún era capaz de reaccionar a los movimientos de mi oponente, aunque no sabía si tenía suficiente poder para derrotarla. ¡No podría activar mi Artefacto Sagrado una segunda vez porque estaba claro que ella no pensaba darme la oportunidad! ¡Tenía que estar atento a su Excalibur y atacarla a ella, que era una simple humana! ¡Aunque su espada era un peligro de muerte, ella en sí no lo era! Quizá no era un buen modo de pensarlo, ¡pero tenía que jugármela todo a esa carta!

“¡Lo estás haciendo muy bien! ¡Eres bueno esquivando ataques! ¡Parece que tu ama te ha entrenado bien!”

“¡Sí! ¡Mi ama es muy estricta con mi entrenamiento! ¡Por eso siempre soy capaz de aguantarle el ritmo a gente más fuerte que yo! ¡Igual que ahora!”

¡¡BOOST!!

“¡Libéralo, Boosted Gear!”

¡¡EXPLOSION!!

Detuve el incremento de poder para poder luchar con el que había acumulado hasta ese momento. Si no lo detenía a tiempo, el equilibrio de mi poder podría descompensarse y tendría que empezar de cero.

¡PUM-PUM!

Sentía el poder recorriendo todo mi cuerpo. ¡Sólo era mi cuarto aumento, pero creo que podría valer para derrotarla! Y si no era el caso, ¡entonces intentaría cargarme toda su ropa! Sí, ¡no me importaba si era una técnica muy sucia! ¡No había soportado todo aquel entrenamiento infernal y la lucha contra los Phenex para nada! ¡Vamos, que pienso desnudarla! Creo que voy a tener que utilizar mi ‘Dress Breaker’. Me dirigí hacia Irina mientras concentraba el poder mágico necesario para poder rasgar sus ropajes.

“Perdona por desnudarte.”

“¡Cochino!”

Irina esquivó mi placaje mientras se cubría como si intentase protegerse de un acosador sexual. ¡Tsk! ¡Es muy rápida! ¡Pero no pensaba rendirme! ¡No me importaba si era un pervertido! ¡Iba a vivir a tope!

“¡Aún no he terminado!”

Empecé a seguirle el ritmo a los movimientos de Irina. ¡Derecha! ¡No, izquierda! ¡De alguna manera era capaz de predecir hacia donde se iba a escabullir Irina gracias a las ganas que tenía de emplear mi técnica en ella!

“Ise-kun se está moviendo mucho mejor de lo normal.”

“El poder de su lujuria mejora sus condiciones de base hasta este punto...”

Akeno-san y Koneko-chan lo estaban comentando. Parece que las dos estaban impresionadas ante mi “poder lujurioso” y estaban sorprendidas. ¡Lo siento por ser un pervertido, pero nadie me va a parar una vez que me he motivado para desnudar a una chica! Al final fui capaz de adelantarme al lugar al que Irina pretendía escapar.

“¿¡Qué!? ¿¡Me has alcanzado!?”

Irina parecía sorprendida. Fufufu. ¡No se te ocurra menospreciar mi “poder lujurioso”! ¡Ya te tengo! ¡Voy a despelotarte aquí y ahora! ¡Voy a echarle un buen vistazo a esos oppai! Reduje la distancia entre los dos mientras movía los dedos y ponía cara de salido. ¡Salte hacia ella como si me estuviera zambullendo en una piscina! ¡Itadakimaaasu~!(25)

Pero... antes de que alcanzase a Irina, esta se agachó, ¿Q-Q... Qué...? No podía detenerme en el aire y pasé por encima de Irina y acabé atravesando la barrera justo donde estaban Asia y Koneko-chan...

Y tuvo que pasar. Mis manos tocaron sus hombros y luego...

RIIIIIIS...

El uniforme de Asia y el de Koneko-chan saltaron por los aires. Sí, hasta la ropa interior. Las dos se quedaron completamente desnudas. El ‘Dress Breaker’ fue todo un éxito. Los pechos, aún en desarrollo, de Asia y los pechitos de lolita de Koneko-chan quedaron expuestos justo delante de mí.

PLIC...

Me empezó a sangrar la nariz. ¡Muchas gracias! ¡No! ¡No quería decir eso! ¡Esto ha sido...!

“¡No!”

Asia intentó taparse porque estaba muy avergonzada. ¡Lo siento Asia! Pero tengo que decir que sigues con unas proporciones perfectas, como siempre. ¡Onii-chan tiene que comprobarlo porque parece que tus pechos aún siguen creciendo! Por otro lado, Koneko-chan... Seguía con la misma cara inexpresiva de siempre, pero su cuerpecito empezó a temblar y levantó el puño. Oh mierda...

“¡Ko-Koneko-chan...! ¡No te pongas así! ¡Ha sido un fallo por mi parte! ¡Bueno, ha funcionado así que no ha sido un error, pero...! ¡Creo que hasta los pechos pequeños también son encantadores! ¿Eh? ¿¡Pero qué estoy diciendo!? ¡No es eso! ¡La culpa es que Shidou Irina lo ha esquivado! ¡No os estaba apuntando ni a Asia ni a ti...! P-pero en cualquier caso, ¡muchas gracias por todo! ¡Sólo te doy las gracias por si se da el caso de...!”

“¡Maldito pervertido...!”

¡BOOOM!

“¡Gwaaaaah!”

Recibí un golpe terrible en el estómago y noté una sensación extraña en el cuerpo. ¡Waaaaaah! ¡Estaba volando por los aires! Cuando aterricé violentamente contra el suelo aún seguí rodando unos cuantos metros... ¡Cough! Había sido un daño crítico... Me dolía tanto que no era capaz ni de moverme.

POC POC

Irina me dio golpecitos con un dedo.

“Ise-kun, ¿estás vivo? Creo que eso ha sido un castigo divino por crear semejante técnica. Esto debería servirte de lección para que selles todas tus técnicas pervertidas, ¿vale?”

“No... Es la técnica que cree con todo mi talento para la magia... Voy a continuar destruyendo la ropa de las chicas... Bastante duro me fue elegir si desarrollar esta técnica u otra para poder ver a través de la ropa de las chicas...”

Me puse en postura de combate mientras me incorporaba lentamente.

“¡Seguiré peleando hasta que sea capaz de romper la ropa de las chicas sólo con mirarla!”

¡Ya había recuperado mi espíritu de lucha! ¡Me dirigí hacia ella de nuevo!

“¡Ser capaz de luchar por unos motivos como esos...! ¡Definitivamente algo no va bien en tu cabeza!”

“¡Shidou Irina! ¡El deseo sexual es una fuente de poder! ¡Es justicia!”

“¡Dios, dame la fuerza necesaria para acabar con este Demonio lujurioso! ¡Amén!”

Irina sujetó fuertemente su espada sagrada y vino corriendo hacia mí. Me agaché para poder darle una patada a Irina y hacerla caer mientras lanzaba su ataque, pero Irina se percató y dio un pequeño salto.  ¡Utilicé mi pierna de apoyo para incorporarme rápidamente y lancé un uppercut(26)!

¡FRISH!

Mi golpe no alcanzó su destino. Irina agudizó la mirada y soltó un corte con su katana desde el lateral, pero pude esquivarlo saltando hacia atrás. Irina me miró sorprendida.

“... Lo siento. Parece que te estaba tomando a la ligera. Tienes unos movimientos muy buenos.”

Irina se puso seria. Oh, ¿entonces puedo ganar esto? Eso es lo que pensaba, pero... de repente caí al suelo.... ¿Pero qué...? Noté como si se me fueran las fuerzas. Podía moverme soportando el dolor hasta cierto punto, pero esto era diferente. En serio, no me quedaban más fuerzas... Mierda... ¿¡Qué está... pasando...!?

Cuando miré mi estómago... ¡ vi que me estaba saliendo humo! ¿¡No era este el daño causado por las espadas sagradas!? ¿¡Pero qué cojones...!? ¿¡Me había alcanzado con su último ataque!? Apenas me había rozado y ya había terminado así...

“Ese es el daño causado por una espada sagrada. Elimina el poder y la propia existencia de los Demonios y los Ángeles Caídos que son cortados por su filo. Si hubiera sido un corte más profundo, entonces habría sido una herida fatal.”

¡Sólo fue un pequeño arañazo! ¿¡Tan fuerte era su poder como para que acabase de rodillas en el suelo!?

¡RESET!

Mi Boosted Gear también había llegado a su límite. Perdí todo el poder que había acumulado hasta el momento. Mi poder volvió a la normalidad. ¡Cómo podía haber pasado esto!

“Si hubieras esperado a otro incremento de tu Boosted Gear, entonces podrías haber esquivado ese ataque. Habríamos podido tener un combate como es debido. Has perdido por utilizar tu Artefacto Sagrado sin saber la diferencia de poder que había entre tu rival y tú. Un simple error como ese podría haber sido fatal en una lucha a vida o muerte.”

.... Maldita sea. No había nada que hacer. Mi cuerpo no se movía... ¿He perdido? ¿He hecho el ridículo delante de Buchou y de Asia? ¡Qué miserable!

“¡¡Haaaaaaaaa!!”

Kiba estaba concentrando su poder e intentó crear algo en su mano. Tenía forma de espada, pero...

“¡El poder destructivo de tu espada sagrada o el de mi espada demoniaca! ¡Veamos cuál es más fuerte!”

Lo que apareció en la mano de Kiba era una espada gigantesca. Kiba la sujetó con las dos manos mientras liberaba un aura ominosa. Era grande. De hecho, era más alta que el propio Kiba, mediría más de dos metros... ¡Kiba la blandió con fuerza! El golpe se dirigía hacia Xenovia, pero ella suspiró como si estuviera realmente decepcionada.

“Qué pena. Has tomado la decisión equivocada.”

¡KLANG!

¡Fue el sonido de un violento choque de los dos aceros! Un gran fragmento metálico salió volando por los aires. Era la hoja de la espada de Kiba, que se había roto. La Excalibur de Xenovia había quebrado por completo la espada demoniaca de Kiba.

“Tu mejor baza es la gran variedad de espadas que puedes crear y tu velocidad. Necesitarías demasiada fuerza para poder utilizar una espada gigantesca como esa, y perderías la velocidad de la que tanto te enorgulleces. ¿Buscas poder destructivo? Para tu estilo de combate eso es algo innecesario. ¿Ni siquiera eres capaz de ver algo así?”

¡PAM!

El pomo de la espada se incrustó en el estómago de Kiba. Fue un movimiento simple, pero incluso esto generó una onda de choque. Eso quería decir que incluso el pomo de la espada tenía el mismo poder destructivo que la hoja.

“¡Gwah!”

Kiba se quedó tendido en el suelo después de vomitar.

“Aunque no haya sido un corte con la hoja, este golpe será suficiente para que te quedes un rato en el suelo.”

Xenovia miró fijamente a Kiba unos instantes y luego se dio la vuelta.

“....... Es.... ¡Espera!”

Kiba intentó agarrarla, pero todos ya sabían que el combate había terminado. Akeno-san retiró su barrera. El aura roja que cubría toda la zona se desvaneció. El combate había acabado.

“Senpai, te sugiero que la próxima vez que luchemos intentes hacerlo manteniendo la calma. Rias Gremory, confiaré en lo que hablamos antes. Además, deberías entrenar un poco mejor a tus sirvientes. Aún se puede pulir mucho más su estilo de combate.”

Kiba miró a Xenovia con unos ojos cargados de odio. Entonces, Xenovia me miró a mí.

“Te diré algo. El Dragón Etéreo ya ha despertado.”

... ¿Qué acababa de decir...?

“Acabarás por encontrarte con él, pero en tu estado actual, no le podrías vencer jamás.”

Xenovia dijo esto y emprendió la marcha después de recoger sus cosas.

“Espérame, Xenovia. Bueno, pues eso es todo, Ise-kun. Avísame si quieres que te juzgue por tus pecados. Amén.”

Shidou Irina me guiñó un ojo mientras me enseñaba una cruz. Después, se marchó detrás de Xenovia. Buchou cerró los ojos. Estoy seguro de que no estaba para nada satisfecha. Kiba y yo sufrimos una derrota inapelable.

(22).- “Creador de Espadas”

(23).- “Rasga vestiduras”

(24).- “Marca de Fuego” y “Niebla Congelante”

(25).- Expresión que se dice antes de comer algo.

(26).- Puñetazo que se lanza de forma ascendente, normalmente dirigido al mentón del oponente.


Parte 8

“¿Estás bien?”

Asia puso su mano sobre mi estómago y empezó a curar mi herida con su Artefacto Sagrado. Asia llevaba puesto el uniforme de repuesto que guardaba en la sala del club. Lo llevaba porque yo le había roto el otro poco antes. La cálida luz verde que emanaba de su mano me cubrió y curó mi herida.

“Te he mostrado una parte de mí que no mola nada, Asia.”

Se lo dije mientras me reía, pero Asia negó con la cabeza.

“Me alegro de que hayas acabado sólo con esta herida después de ser alcanzado por una espada sagrada. Estaba muy asustada de pensar que Ise-san podría haber desaparecido.”

Aaaaah. ¿He vuelto a hacer que Asia se preocupase? Siempre le estaba dando disgustos a esta pobre chica.

“Siento haberte roto el uniforme.”

Me disculpé sinceramente. Lo mirase como lo mirase, estaba claro que había sido mi culpa. Pero Asia simplemente me sonrió.

“Seguro que tenías algún plan pensado, ¿verdad, Ise-san? Me parece bien cualquier cosa que me haga Ise-san.”

.....Snif... Se me humedecieron los ojos. Asia, ¡creías tanto en mí! Pero sabes, Asia, no estaba pensando en otra cosa que no fuera desnudar a aquella chica. Aaaaah. La sonrisa de Asia era demasiado brillante para mí...

“Podrías haber ganado sui hubieras esperado a otro incremento de tu Artefacto Sagrado...”

Koneko-chan lo dijo mientras me masajeaba los hombros. Duele. ¡Que eso duele, Koneko-chan! Ella también llevaba su uniforme de repuesto, igual que Asia. Pero era la primera vez que Koneko-chan me decía algo así... ¡Estaba un poco conmovido!

“Que no lo supieras significa que aún careces de experiencia en combate real...”

¡Ouch! ¡Has dado en el clavo! ¡Discúlpame por ser un pervertido!

“¡Espera! ¡Yuuto!”

Escuché la voz de Buchou. Cuando miré, vi a Kiba, que parecía marcharse a algún lado, y a Buchou, que estaba enfadada. ¿Pero qué...? ¿Se iba Kiba a algún lado?

“¡Como me abandones no te lo perdonaré jamás! Eres el ‘Caballo’ del grupo de Rias Gremory. Yo también estaré en problemas si te conviertes en un ‘renegado’. ¡Detente ahora mismo!”

“Fui capaz de escapar de allí gracias a mis compañeros... Por eso mis espadas demoniacas deben cargar con el peso de todos sus lamentos...”

Después de decir eso, Kiba desapareció.

“Yuuto... ¿Por qué...?”

No podía mirar la cara de tristeza que tenía Buchou. En aquel momento, tomé una determinación.


Parte 9

“Aaaaaah. ¿Y bien? ¿Para qué me has llamado?”

En mi siguiente día libre.

Llamé al ‘Peón’ de Kaichou, Saji, y quedé con él en la estación de tren. Saji parecía apático. Conseguí ponerme en contacto con él gracias a Buchou.

“Tiene razón... ¿Qué estáis tramando vosotros dos?”

La que me estaba tirando de la camiseta para que no me escapase era Koneko-chan. Me la encontré por casualidad cuando me dirigía a la estación en la que había quedado con Saji. Intenté huir, pero me atrapó fácilmente. Seguía siendo igual de inferior a Koneko-chan en cualquier aspecto físico, como siempre. Bueno, no podía evitarlo. Parecía que no le había gustado el hecho de que intentase escabullirme después de verla, así que había decidido quedarse para mantenerme vigilado. Creo que aún estaba molesta conmigo por haberla dejado desnuda unos cuantos días antes. La razón por la que había llamado a Saji era... Bueno, tosí una vez y se lo dije a los dos.

“Voy a pedirle permiso a Shidou Irina y a Xenovia para que me permitan destruir las Excalibur.”


No fue sólo Saji, Koneko-chan también se quedó tan sorprendida que tenía los ojos como platos.

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