miércoles, 27 de febrero de 2013

High School DxD - Vol 1 - Vida 2


Bueno, pues aquí estamos de nuevo con otra entrega de High School DxD, que no lo leerá nadie pero yo disfruto mucho traduciéndola. No hay expectativas de que Joeyna saque nada pronto, más que nada porque sigue perra++ en lo que respecta a tareas traductoras, y sigo pendiente de que me pase la corrección de lo que llevo de Replace II para alternar las novelas (aunque me da que ya terminaré de publicar esta antes de empezar con  la segunda de Kuroko)

Por cierto, odio que en esta novela pongan esa especie de onomatopeyas entre líneas. De hecho, odio traducir onomatopeyas, porque nunca sé qué correspondería. Por eso suelo dejarlas en inglés, adaptarlas ligeramente, o yo que sé. Me agobio mucho cuando las veo... 




Vida.2 – Mis comienzos como Demonio

Parte 1

“¡Haaaaaaaa!”

Era medianoche y yo estaba pedaleando a toda velocidad en mi bicicleta. La razón era simple. Estaba entregando los panfletos que tenían ese círculo mágico tan fácil de usar.

Los ambiciosos humanos los tomarían entre sus manos y formularían sus deseos. Entonces nosotros, los Demonios, seríamos invocados delante de ellos. Miré el dispositivo que llevaba en la mano para ver el mapa de la zona en la que estaba.

Había puntos rojos que no paraban de parpadear. Me dirigí hasta que llegué a mi objetivo. Señalaba una casa cercana.

Metí un folleto en el buzón y me fui a otro de los puntos rojos que estaban por allí cerca. Repetí ese proceso una y otra vez.

“¡Jodeeeeeeeeer! ¡No tengo otro remedio! ¡Soy un Demonio! ¡No me queda más remedio!”

Grité mientras seguía pedaleando.

*

Volveré a ese día, cuando descubrí que era un Demonio, para explicar mi situación actual. Ese día, también descubrí que era el poseedor de un Artefacto Sagrado. Ese día, descubrí que Yuuma-chan era un Ángel Caído. Y ese día también descubrí que Rias-senpai era un Demonio.

Por cierto, mis alas desaparecieron poco después de haberlas sacado. Menos mal. Era algo que podría suponer alguna que otra molestia para mi estilo de vida. Aparentemente, las alas podían usarse para volar una vez que te acostumbrabas a ellas. La sensación de tener alas era bastante extraña... pero el hecho de moverlas ya era increíble.

“Si sigues a mi lado te espera un futuro brillante.”

Eso me dijo Rias-senpai guiñándome un ojo cuando me quedé cabizbajo tras descubrir que me había convertido en un Demonio. Al parecer me había convertido en su sirviente después de que me reencarnase como Demonio, así que ahora me tocaba vivir como tal.

Los humanos que renacían como Demonios se convertían en sirvientes del Demonio que les hizo reencarnarse. Bueno, esa era una regla de los Demonios.  ¿Qué?  ¿Yo? ¿Un sirviente? Puede que no estuviera mal convertirse en el sirviente de una preciosidad así pero, aún contando con eso, no podía aceptarlo así como así.

“A decir verdad, hay una jerarquía entre los Demonios. Algunos poseen algo así como títulos nobiliarios. Yo tengo uno. El lugar de nacimiento y la familia en que lo hagas tienen una gran importancia para determinar tu sitio en esa jerarquía, pero hay casos en los que se consigue ascender. Al principio todos empezamos desde abajo.”

“¿¡Puedes dejar de hablar como si fuera un maldito anuncio!? ¿Estás hablando en serio? Todavía no me lo puedo creer.”

Rias-senpai empezó a susurrarme al oído mientras yo me estaba quejando. Tío, su pelo olía tan bien... Era como si se me fuera a congelar el cerebro. Eh, ¿será magia?

“Ya de paso, podrías ser capaz de empezar una vida en la que podrías llegar a ser popular entre las chicas.”

¡...! Intenté pensar en lo que me acababa de decir...

“¿¡Cómo!?”

...pero las palabras salieron antes de que pudiera conseguirlo.

Parecía que mis pensamientos pervertidos eran extraordinarios, dado que es la única cosa en la que soy capaz de pensar.

Espera, esto podía ser obra de algún hechizo que me hubiera echado Rias-senpai. Estaba mucho más tenso de lo habitual.

“La mayor parte de los Demonios puros murieron en una batalla de hace mucho tiempo. Por eso, nosotros, los Demonios, empezamos a conseguir un montón de súbditos. Bueno, perdimos gran parte de nuestra fuerza, así que no somos capaces de formar un ejército enorme como los de antaño. En cualquier caso, necesitamos seguir incrementando nuestro número. Al igual que los humanos, hay Demonios de ambos géneros y son capaces de engendrar descendencia. Pero incluso contando con los nacimientos, nos llevaría mucho tiempo llegar a alcanzar la misma población que teníamos antes. Además, los Demonios tenemos un número de nacimientos bastante bajo, así que a este paso no seríamos capaces de resistir ante los Ángeles Caídos. Por eso buscamos humanos con habilidades interesantes y los convertimos en Demonios, haciendo que sean nuestros sirvientes.”

“Así que, después de todo, soy un sirviente.”

“Oh, pero no pongas esa cara. Ahora es cuando llega lo interesante. Como eso sólo hace que aumente el número de sirvientes, realmente no sirve para incrementar el número de Demonios poderosos, así que se creó una nueva norma. Esta consiste en que se dará facilidades a los Demonios reencarnados que sean poderosos, es decir, a los que en su día fueron humanos. Si un Demonio reencarnado es lo suficientemente fuerte, puede obtener incluso un título. Por eso hay tantos Demonios en el mundo de los humanos. También hay otros Demonios, como es mi caso, que vienen aquí de motu propio. Ise, probablemente no te hayas dado cuenta nunca, pero seguro que te has cruzado con algunos Demonios a lo largo de tu vida.”

“¿Eh? ¿¡Entonces siempre ha habido Demonios a nuestro alrededor!?”

“Sí, aunque hay gente que puede distinguirlos y gente que no. Normalmente aquellos que sienten un fuerte deseo o los que desean obtener la ayuda de los Demonios pueden distinguirnos. Lo normal es que los que utilizan el círculo para invocarnos sean de los que son capaces de distinguirnos. También hay gente como tú, Ise, que puedes distinguir a los Demonios pero que sigues sin creer en nuestra existencia. Aunque la mayoría termina por creer en ella una vez que ven nuestros poderes mágicos.”

¿¡Qué!? ¡Así que la razón por la que invoqué a Rias-senpai fue que lo de deseé con todas mis fuerzas! Parece que a fin de cuentas la sociedad de los Demonios también ha ido cambiando. Tenía que ser algo bastante complicado, pero no era eso lo que me preocupaba ahora. ¡Lo importante es que eso significaba que yo también tendría mis oportunidades!

“¿¡Significa eso que, llegado el caso, sería capaz de obtener un título nobiliario!?”

“Sí. No es imposible. Aunque, por supuesto, llevaría mucho tiempo y esfuerzo conseguirlo.”

“¡¡Síiiiiiiiiiiii!!”

Estaba gritando en medio de la clase.

“¿¡Lo dices en serio!? ¿¡Podría formarme mi propio harén!? Podría tener sexo con todas, ¿¡verdad!?”

“Claro. Supongo que no pasaría nada si son tus propios sirvientes.”

Sentí un escalofrío recorriéndome todo el cuerpo. ¡Era demencial! ¿¡En realidad era posible hacer algo así!?

En el mundo real, siendo humano, era realmente difícil conseguir tu propio harén.

Si hubiera seguido siendo un simple humano, hiciera lo que hiciera, me habría resultado imposible conseguir rodearme de chicas guapas, ya que encima había empezado bastante mal.

Ni siquiera había sido capaz de tener ni una sola novia. Bueno, tuve una, pero como acabó matándome... Pero ahora... ¡Ahora podría...!

“¡¡Tomaaaaaaaa!! ¡Ser un Demonio mola! ¡Sí señor! ¡No puedo tranquilizarme! ¡Incluso podría empezar a tirar todo el porno a...!”

En ese momento dejé de hablar y empecé a pensar sobre la decisión que estaba a punto de tomar.

“No. La revista porno no. Esa no. No puedo abandonarla ahora, es mi tesoro. ¡Aún puedo usarla hasta que mamá la encuentre! Una cosa es una cosa, y otra...  Síp, no se puede comparar.”

“Fufufu. Este chico es realmente divertido.”

Rias-senpai empezó a reírse como si me encontrase gracioso.

“Vaya. Es justo como me dijiste, parece que tenemos un hermanito un poco atontado.”

Hasta Himejima-senpai se estaba riendo. “Jajaja...”, mientras decía cosas malas sobre mí.

“En cualquier caso, Ise. Estás de acuerdo en ser mi sirviente, ¿verdad? Si demuestras tener potencial acabarás por ascender. Y así serás capaz de acabar recibiendo un título nobiliario.”

“¡Sí, Rias-senpai!”

“No, así no. Tienes que llamarme ‘Buchou’.”

“¿Buchou? ¿No puedo llamarte Onee-sama?”

Le pregunté algo arrogante. Siempre he querido tener una Onee-sama(12). Aunque no fuera una situación yuri(13), todos los chicos querrían llamar ‘Onee-sama’ a una chica tan guapa.

Rias-senpai pensó en ello seriamente un instante y finalmente negó con la cabeza.

“Hmmmmm. Suena bien, pero como vamos a operar principalmente en el instituto creo que ‘Buchou’ queda mejor.”

“¡Bien! Entonces, ¡enséñame cómo ser un Demonio, Buchou!”

Rias-buchou estaba sonriendo como si estuviera muy feliz después de oírme decir eso.

“Bien dicho. Buen chico, Ise. Está bien, voy a convertirte en un hombre.”

Rias-buchou empezó a tocarme la barbilla con sus dedos. ¡Onee-sama! ¡Es mi Onee-sama! ¡Por el momento me conformaré con ser un Demonio a su servicio!

¡No! ¡Tengo que conseguir ascender! Supongo que está bien. Ya que no puedo volver a ser un humano tendré que seguir avanzando. Ya había aceptado la situación en la que me encontraba.

Puede sonar estúpido, pero supongo que no pasa nada. Más bien era que mis ambiciones estaban plagadas de actos pervertidos. Quizá por eso me notaba más tenso de lo habitual.

Me sentí aliviado de ver que seguía siendo un chico que iba a trabajar duro para cumplir todos sus deseos sexuales. Más que pensar en mi futuro, pensé que por el momento podría divertirme.

“¡Voy a convertirme en el Rey del Harén!”

Si lo pensaba tranquilamente, era posible que acabase en aquella situación por algún truco mágico de Rias-senpai. Pero bueno, no pasa nada siempre y cuando estemos hablando de un harén.

Sería maravilloso llegar a conseguir mi propio harén. Con este pensamiento, me convertí en un miembro del club de ocultismo.

*

Unos días más tarde, empecé mi vida como un Demonio...

Estaba dando pedales como un loco. Desde aquel día, me convertí en el sirviente de Rias-buchou y me pasaba todo el día sudando de un lado para otro.

Primero nos reuníamos por la noche en el edificio antiguo de la escuela. Hacíamos esto porque los Demonios se vuelven más fuertes por la noche.

Aquel extraño fenómeno que me pasaba por las noches era del poder de un Demonio. Dado que somos Demonios, nuestro poder se nutre directamente del poder de la oscuridad de la noche.

Por el efecto contrario, me volvía más débil de día. Los Demonios temen a la luz. Cuanto más fuerte sea la luz, más letal se vuelve para nuestros cuerpos. La luz es como un veneno. Eso es lo que me contó Rias-buchou. Las criaturas que empleaban la luz como un arma, los Ángeles Caídos y los Ángeles, eran nuestros principales enemigos.

Me ordenaron que huyera si me los encontraba alguna vez. Al parecer, una vez que te acostumbrabas a ello, la luz del día tampoco suponía ningún problema. Yo me encontraba débil por las mañanas porque acababa de renacer como un Demonio y mi cuerpo aún no podía soportar ni siquiera la luz del sol. La cosa es que dentro de un tiempo acabaría por acostumbrarme.

La razón por la que me dejaron solo después de renacer como un Demonio era que querían que descubriera por mí mismo los cambios que experimentaba mi cuerpo. Estaba esperando al momento adecuado para contarme toda la verdad. Y ese fue el día que fui atacado por aquel tío trajeado. Era como si hubiera estado predestinado.

En cualquier caso, estaba trabajando duro como sirviente personal de Rias Gremory. Como acababa de convertirme en un Demonio, me hicieron estudiar la sociedad de los Demonios y su funcionamiento. Como prácticas, me ordenaron ir a repartir los panfletos con los círculos mágicos de invocación. Pensé que mis padres se preocuparían si me marchaba todas las noches.

Pero Rias-buchou me dijo con una sonrisa: “Hice algo con tus padres el otro día, así que no pasará nada.”  Aunque volviera tardísimo a casa mis padres no se enfadaban. Simplemente me contestaban con un “Bienvenido.”

Los poderes de Rias-buchou son impresionantes. Y lo que era aún más impresionante era el control que tenía en la academia. Como estaba en su territorio, ella era la directora en las sombras del instituto entero. El director tenía lazos con los Demonios, así que no podía oponerse a la Casa de los Gremory.

En otras palabras, la academia entera era, básicamente, una propiedad de Rias-buchou. Gracias a eso éramos capaces de entrar allí por la noche sin problemas.

*

Y ahora de vuelta a mi trabajo actual.

Todos los días tenía que salir con mi bicicleta a echar folletos en los buzones con la ayuda de un aparato especial. El aparato que llevaba era una máquina secreta desarrollada con la tecnología del mundo de los Demonios. Parecía una de esas consolas de última generación con pantallas táctiles.

Tenía una pantalla, unos cuantos botones y un stylus para la pantalla. La estaba usando según lo que me habían enseñado. En la pantalla aparecía un mapa de la ciudad en la que vivía, es decir, del territorio de Rias-buchou. A cada Demonio se le asignaba un territorio en el mundo humano y esa era la única zona en la que se le permitía actuar.

El trabajo consistía en:

Primero nos invocaban y luego hacíamos un contrato con ellos.

Después de eso, cumplíamos sus deseos.

Como pago, recibíamos algo adecuado según el deseo que hubieran realizado.

Podía ser dinero, un objeto o incluso su propia vida.

Bueno, la verdad que últimamente no había muchas personas dispuestas a ofrecer su vida para que se cumpliera su deseo. E incluso aunque hubiera una persona así, si el pago ofrecido no se correspondía con el deseo solicitado, no había ninguna garantía de que este fuera a cumplirse. Según dijo Rias-buchou, “No todas las personas valen lo mismo.”

Sí, era bastante duro. Las luces rojas que parpadeaban en la pantalla mostraban las casas de personas con un alto nivel de ambición. Así que tenía que ir a todos esos sitios a repartir los panfletos con el círculo de invocación. Tener luces parpadeando en la pantalla significaba que mi trabajo aún no había terminado.

Como me había convertido en un Demonio, el resto de la gente e incluso la policía, no me prestaban atención. Desde el momento que empezaba a ejercer de Demonio, los humanos no eran capaces de detectar mi presencia mientras estuviera trabajando. No había parado ni un sólo día, pero parecía que las luces parpadeantes no iban a terminarse en la vida.

Eso quería decir que los humanos son unas criaturas muy codiciosas. Una vez que se formulaba un deseo, al parecer se convertía en una adicción que hacía que siguieran formulándose más y más. El contrato quedaba limitado a actuar sólo durante la noche. Esto es debido a que los Demonios sólo pueden actuar cuando es de noche. El día es un territorio dominado por los Ángeles y Dios. Esa parte aún no la entendía del todo.

Esos círculos mágicos sólo podían utilizarse una vez, por lo que una vez que lo usaban me tocaba volver a entregarlos. En otras palabras, ese trabajo no iba a terminar nunca. Bueno, gracias a eso, Rias-buchou y los demás podían seguir realizando su trabajo y ganando puntos como Demonios. Si seguíamos consiguiendo contratos y cumpliéndolos con éxito, gozaríamos del reconocimiento del Rey de los Demonios. Así es como funcionaba esto.

¡Si seguía trabajando a este ritmo, recibiría un título de manos del mismo rey! Así que mejor me centraba  en seguir haciendo un buen trabajo. ¡Lo quiero! ¡Y también quiero conseguir un contrato por mí mismo!

“¡Ooooooooh síiiiiiii! ¡Quiero estar pronto rodeado de tías buenas!”

Pero por el momento me tocaba ser paciente y seguir haciendo todo lo que me encomendasen. Pero, ¿cuánto tiempo tendría que seguir así...?

(12).- En principio se usa para referirse con respeto a una hermana mayor, aunque aquí

(13).- Término que se emplea para referirse a las relaciones homosexuales entre mujeres. Es contrapuesto al yaoi.


Parte 2

Cierto día, después de clase...

Me dirigí hacia el viejo edificio después de separarme de mis dos compañeros. Para empezar, el trabajo de repartir los panfletos era un trabajo que originalmente realizaban los familiares de Rias-buchou. Transformaba a su ratón y su murciélago para que tomasen forma humana, y después de eso, se iban por ahí a repartir los folletos, igual que estaba haciendo ahora yo.

Estaban entregando papeles tanto de noche como de día. La razón por la que me encomendaron esa tarea era porque Rias-buchou quería que conociera qué tipo de tareas hacen los Demonios en sus comienzos. Incluso Kiba y los demás empezaron así. Kiba, Toujou Koneko-chan y Himejima-senpai eran los sirvientes de Rias-buchou, así que todos eran mis senpais.

Todos ellos pasaron por la experiencia de tener que ir a entregar los panfletos. Hablando de ellos, eran unas personas...  Espera, no eran personas, eran Demonios. Podría ser algo sin importancia, pero conseguí la confirmación de Toujou Koneko-chan y Himejima-senpai para llamarlas “Koneko-chan” y “Akeno-san” respectivamente. Parecía que estaba un paso más cerca de poder llevarme bien con ellas.

Fufufu... Las llamé por su nombre delante de Matsuda y Motohama a propósito. Las caras que pusieron no tenían precio. No le había contado nada sobre mí a Matsuda y Motohama. Aunque lo hubiera hecho, tampoco me habrían creído. Además, no quería ponerles en una situación peligrosa a ellos también. Yo ya había muerto una vez, no podría soportar que ellos corrieran mi misma suerte.

Y Kiba... ¡Muérete, maldito Don Juan! ¡En la vida pienso llamarte Kiba-kun! Entonces me llamaron para que acudiera al club.

Entré en aquel viejo edificio, que ya empezaba a resultarme bastante familiar y fui directo hasta la sede del club, que estaba en el segundo piso.

“Ya estoy aquí.”

Todo el mundo ya estaba allí. Vaya, ¿era el último? La habitación estaba oscura y la ventana estaba tapada para impedir que entrase la luz. La única iluminación que tenía la sala venía de  las velas que estaban dispersadas por el suelo.

“Aquí estás.”

Tan pronto como Rias-buchou confirmó que había llegado, le ordenó algo a Akeno-san.

“Sí, Buchou. Ise-kun, ponte en medio de ese círculo mágico.”

Akeno-san me estaba haciendo unas señas con la mano. ¡Una bishoujo me estaba pidiendo que me acercase! Eso solo ya era una recompensa para mí. Me puse en el medio del círculo. ¿Y ahora qué?

“Ise, tu trabajo como repartidor de folletos ha terminado. Bien hecho.”

Rias-buchou estaba sonriendo. ¿Eh? ¿En serio? Ya había terminado mis días de repartidor.

“Ahora podrás empezar tu trabajo como un Demonio profesional.”

“¡Eh! ¿¡Ya puedo hacer contratos!?”

“Sí, correcto. Aunque como es tu primera vez, va a ser un contrato con alguien que tiene un pequeño deseo. Koneko recibió dos peticiones hace poco. Como va a ser duro hacer ambos, te dejaré uno a ti.”

“Ayúdame, por favor...”

Koneko-chan inclinó la cabeza. Así que voy a ir en nombre de Koneko-chan. Me parece bien, que ya me estaba cansando de ir repartiendo panfletos todos los días. Pasarse todas las noches dando pedales en una bicicleta mientras repartía papeles hacía que me sintiera solo. Los demás miembros estaban fuera del círculo, pero Akeno-san estaba dentro y parecía como si estuviera preparando algo. Entonces, el círculo mágico empezó a emitir unas luces blancas y azules.

“Ummmm...”

“Quédate quieto, Ise. Akeno está grabando tu sello en el círculo mágico.”

¿Mi sello? El círculo mágico que estaba en la habitación era el signo de la Casa de los Gremory. Me dijeron que para nosotros, los sirvientes de Rias-buchou, era como un escudo de armas. Así que para aquellos que intentaban invocarnos y hacer un contrato con nosotros, ese signo representaba nuestra marca. Cuando se  utilizaba su poder, se sincronizaba con este círculo mágico. Kiba y los demás tenían el signo grabado en sus cuerpos y este se activaba siempre que usaban sus poderes. Bueno, al menos eso es lo que me contaron. Pensé en el hecho de que todos tuviéramos grabada la misma marca. Pero antes, todo aquel que se convirtiera en un Demonio necesitaba aprender a controlar sus propios poderes. Utilizar la magia de forma sincronizada con los círculos mágicos era la siguiente lección. Bueno, eso pensaba yo.

“Ise, extiende tu mano hacia aquí.”

Levante mi mano izquierda hacia Rias-buchou, tal como me pidió. Empezó a escribirme algo en la mano utilizando sus dedos. ¿Sería algún tipo de encantamiento? Parecía estar escribiendo una especie de círculo... Al instante, la palma de mi mano empezó a brillar. Tenía dibujado un símbolo circular. Ahora tenía un círculo mágico grabado en la mano. Estaba lanzando brillos azules y blancos. ¡Wow...! ¡Un círculo mágico!

“Este sello mágico es de teletransporte. Puede hacer que llegues instantáneamente allí donde se encuentre el cliente, y cuando finalices el contrato, te permitirá volver a esta habitación.”

Ah, ya lo pillo. Así que era ese tipo de habilidad...

“Akeno, ¿estás preparada?”

“Sí, Buchou.”

Akeno-san salió fuera del círculo.

“Ahora ponte justo en el centro.”

Me planté en el medio del círculo mágico tal y como me indicaron. Entonces, el círculo empezó a brillar intensamente con un color azul. Podía notar su poder. Podía notar como ese poder se adentraba en mi cuerpo cuando entraba en contacto con él. ¿Era esta una característica de los sirvientes?

“El círculo mágico está reaccionando con el del cliente. Ahora vas a teletransportarte hasta allí. Ya has leído la guía de qué hacer después de teletransportarse, ¿verdad?”

“¡Sí!”

“Bien dicho. ¡Ahora ve!”

¡Me puse algo tenso! ¡Mi primer trabajo! ¡Seguro que iba a ser capaz de completarlo sin problemas! El círculo mágico empezó a brillar más intensamente. Parecía que iba a llegar a mi destino en unos instantes. Mi cuerpo estaba cubierto de luces por todas partes. Incluso tuve que cerrar los ojos por culpa del resplandor. ¡Cuando volviera a abrir los ojos ya estaría donde estuviera el cliente! ¡Estoy listo! Y entonces... por fin... me teletransporté...

.............

.............

Hmmmm.... ¿Hmmmmm? ¿Eh? ¿Ya me he teletransportado? ¿Ya está? Abrí los ojos.

.............

Me quedé sin palabras cuando vi lo que me rodeaba. Era la habitación del club. ¿Eh? ¿Qué había pasado con eso del teletransporte instantáneo? ¿Y el cliente? Cuando miré, pude ver que Rias-buchou ponía una expresión de preocupación mientras se tocaba la frente. Akeno-san estaba diciendo “Vaya vaya...”, como si estuviera decepcionada. El puñetero Kiba estaba suspirando. Me estaban cabreando. ¿Qué había pasado? Entonces, Rias-buchou pronunció mi nombre.

“Ise.”

“Sí.”

“Desafortunadamente, parece que no puedes utilizar el círculo de teletransporte para llegar hasta donde está el cliente.”

¿Eh? ¿Qué quería decir eso? Rias-senpai me lo explicó mientras yo estaba con una expresión de incredulidad.

“Los círculos mágicos requieren una cantidad de poder mágico... No es que requiera demasiado. No, la verdad es que cualquier Demonio puede hacerlo, aunque sea sólo un niño. Usar los círculos de teletransporte es la primera lección para convertirse en un Demonio.”

Ummmmm, entonces... eso quiere decir que....

“Dicho en otras palabras, Ise, tu poder es inferior al que tendría un niño. No, es incluso tan bajo que ni siquiera el círculo mágico es capaz de responder a él. Ise, tu poder es increíblemente bajo.”

¿¡Q-Quéeeeeeee!?

“¿¡Qué coño significa eso!?”

Me quedé mudo. ¿¡Qué!? ¿¡Significaba eso que no iba a poder utilizar el círculo de teletransporte para llegar hasta el cliente!? ¿Soy un Demonio? Lo soy, ¿no?

“Qué desagradable...”

Koneko-chan lo dijo inexpresivamente. Ese fue un golpe duro, Koneko-chan.

“Vaya vaya... Tenemos un problema. ¿Qué deberíamos hacer, Buchou?”

Akeno-san también estaba poniendo cara de preocupación y le preguntó a Rias-buchou. ¡Vaya! Mi debut como Demonio había tenido un comienzo un poco difícil... Rias-buchou estuvo pensando un rato y después dijo claramente.

“Como es un cliente, no podemos hacerle esperar, Ise.”

“¡Sí!”

“Nunca antes había pasado, pero tendrás que ir allí por tu propio pié.”

“¿¡Tengo que ir por mi cuenta!?”

¡Estaba sorprendido! ¡Nunca me habría imaginado eso, Buchou-sama!

“Sí. Irás hasta su casa igual que cuando ibas entregando los panfletos. No queda otro remedio, ya que no tienes ningún poder mágico. Tendrás que apañártelas por tus propios medios para llegar hasta allí.”

“¿¡En bicicleta!? ¿¡Voy a tener que ir hasta el cliente en bicicleta!? ¿¡Existen Demonios de ese tipo!?”

¡Me señaló! Koneko-chan me señaló sin decir nada. Koneko-chan, si que te gusta hacerme sentir miserable, eh...

“¡Date prisa y sal ya! ¡El trabajo de los Demonios es conseguir contratos! ¡No puedes hacer esperar a los humanos!”

 Rias-buchou empezó a meterme prisa con una cara muy seria. Snif... ¡Mi sueño de conseguir un título nobiliario empezaba bastante accidentado!

“¡Uwaaaaaah! ¡¡Me esforzaré al máximo!!”

Salí llorando de la sala del club.


Parte 3

Era medianoche y estaba dando pedales en mi bicicleta a toda velocidad.

Tenía los ojos cubiertos de lágrimas. Lloré. Sí. Estaba llorando. Un Demonio que no era invocado mediante un círculo mágico. Ese era yo. Al parecer, era el primer caso de la historia. Gracias a ello no pude dejar de llorar. ¿¡Qué es eso de que no tengo poderes mágicos!? ¡Joder! ¿¡Seré capaz de hacerme con un titulo nobiliario a este paso!? Iba pedaleando hacia la persona que me había invocado utilizando el localizador portátil. Era un bloque de apartamentos situado a unos veinte minutos desde el instituto. El cliente estaba en uno de ellos. Era como cualquier entrega, los clientes podían enfadarse si tardaba demasiado. Normalmente el teletransporte era instantáneo, pero yo tardé veinte minutos en llegar.

Llamé a la puerta.

“¡Buenas noches! ¡Soy un mensajero de Rias Gregory-sama! Disculpe, está casa ha solicitado una invocación, ¿no?”  

Eso no debería causar problemas. A fin de cuentas, los Demonios sólo pueden ser detectados por los que les invocan. Aunque hiciera algo como aquello en medio de la noche, los vecinos no se enterarían de lo que estaba pasando. Por eso, sólo el cliente podría haber oído lo que acababa de gritar. Durante el tiempo en el que el Demonio hacía su trabajo, le cubría una magia especial. Se utiliza para así no molestar al resto de la gente. Eso es lo que Rias-Buchou me contó.

“¿¡Quién anda ahí!?”

La voz sonaba como la de un hombre que había entrado en pánico.

“Ummmm, soy un Demonio. Es que soy nuevo. He venido aquí porque tu me has llamado.”

“¡No me mientas! ¡Ningún Demonio va por ahí llamando a la puerta! ¡Los Demonios salen del folleto! ¡Así es como he invocado a los demás las otras veces! ¡Y a la que he llamado es a Koneko-chan!”

Sí, tenía razón. Me disculparé por ello. Lo siento. Fue un incidente inesperado, tanto para mí como para los demás.

“Oh, lo siento. No tengo mucho poder mágico, así que no puedo aparecer del círculo mágico.”

“¡Seguro que sólo eres un pervertido!”

Me puse de mala hostia según le escuché decir eso.

“¡No soy ningún pervertido! ¿¡Y qué quieres que le haga!? ¡Yo también quería aparecer desde el círculo mágico! ¿¡Qué clase de triste va a atravesar la ciudad en bicicleta en medio de la noche!?”

“¿Por qué encima eres tú el que se cabrea, so’ pervertido?”

“¿¡Pervertido!? ¡Qué te jodan! ¡Te estoy diciendo que soy un Demonio!”

“¡Vete a casa!”

El cliente abrió la puerta para echarme de allí. Era un tío bastante delgado y tenía un aspecto enfermizo. Parecía estar enfadado, pero tan pronto como me vio, su expresión se relajó.

“¿Estás llorando...?”

“¿Eh? ¿Yo?”

Cuando me toqué la mejilla vi que tenía la mano húmeda. Estaba llorando.

“Eso parece, ¿no? Así que estabas llorando porque estabas afectado por descubrir que eras incapaz de teletransportarte...”

“Eso parece...”

Me dejó entrar a su apartamento. Incluso me preparó un poco de té. Todo el lío del teletransporte y la discusión de antes me habían afectado mucho más de lo que esperaba y estaba llorando sin siquiera darme cuenta. Claro que era como para llorar. El cliente, Morizawa-san, sintió empatía por mí cuando me vio y me dejó entrar. Su apartamento estaba muy limpio. Era un apartamento pequeño para una sola persona. Me contó que de día trabajaba como funcionario. Morizawa-san hacía su trabajo concienzudamente, pero tenía muchas ganas de tener trato con otras personas. Después de conseguir uno de los panfletos que repartimos, se decidió a invocar a un Demonio.

“Así que no ha venido Koneko-chan...”

Se había enamorado de Koneko-chan desde la primera vez que la vio y ella había sido el primer Demonio con el que había realizado un contrato. Desde aquello, había estado invocándola.

“Lo siento, pero parece que también es popular entre los demás clientes. Ella es la representación de los Demonios adorables.”

Se decía que cuando se invocaba a un Demonio podías elegir quien querías que respondiera a la llamada diciendo su nombre. Hoy, él había decidido llamar a Koneko-chan, pero resultaba que estaba ocupada con otro cliente. Si el Demonio llamado no podía ser invocado, entonces otro Demonio tendría que tomar su lugar.

“Quería invocar a alguno de esos Demonios adorables cuando usé el folleto...”

“Yo soy un adorable novato, ¿no te serviría con eso?”

“¡Jajajajaja! ¡Eso que dices es imposible! ¡Si hubiera tenido una espada de plata conmigo podría haberte atravesado! ¡Jajajajaja!”

Tío... te estás riendo pero tus ojos no dicen lo mismo.

“Ya que estamos, ¿qué ibas a pedir cuando intentabas invocar a Koneko-chan?”

Esa era mi pregunta. Quizá yo también podría cumplir su deseo. Pero aquello se vino abajo cuando Morizawa-san sacó cierta cosa de uno de los rincones de su habitación.

“Quería que se pusiera esto.”

¿De dónde era ese uniforme...? Creía haberlo visto antes.

“Es el uniforme de Nagato Yuki.”

“Nagato... ¡Ah! ¡De Suzumiya Haruhi!”

Hasta yo conocía la serie de Suzumiya Haruhi.

“¿A ti también te gusta Nagato, Demonio-kun?”

“No, yo soy más bien de Asakura Ryouko.”

“¿Por qué razón?”

“Por sus pechos.”

“-Gasp-”

Morizawa-san no supo que decir  cuando me escuchó contestarle sin pensarlo ni un segundo. Asakura Ryouko, uno de los personajes principales de la serie de Suzumiya Haruhi y una bishoujo con un cuerpo despampanante.

“Así que eres un aficionado a los pechos grandes...”

“Sí.  Los pechos están llenos de sueños. Estoy segurísimo de ello.”

Me imaginé los pechos desnudos de Rias-buchou botando. Buchou, me enamoré de tus pechos a primera vista. Estaba muy avergonzado como para decírtelo, pero definitivamente protegeré esos pechos. Morizawa-san puso una expresión lujuriosa mientras sonreía.

“Tienes buen gusto. Parece que tienes una gran pasión por los pechos grandes. Va a resultar que tienes un fetiche totalmente opuesto al mío. A mí me gustan los pechos pequeños.”

“Puedo comprenderte. Tengo un amigo con el mismo gusto.”

La persona que me vino a la mente era Motohama. Era un auténtico pervertido, de eso estaba convencido.

“Sí. Koneko-chan es bastante parecida a Nagato, ¿verdad? Y su presencia, aunque tenga ese cuerpecito...”

Ahora que lo decía, tenía un cuerpo bastante pequeño y era bastante inexpresiva. Un cuerpo sin curvas y además era bajita. Se parecían bastante. Nagato Yuki también tenía esas características.

“Por eso quería que llevase esto. ¡Realmente quiero que se lo ponga!”

Empezaron a saltársele las lágrimas. Lágrimas de remordimiento. Seguro que se está arrepintiendo. Así que tantas ganas tenía de que se lo pusiera, ¿eh?

“Siento mucho todo esto. Bueno, déjame que me lo ponga yo.”

“¡Te voy a matar, cabrón!”

Morizawa-san denegó mi amable oferta mientras me gritaba. Por favor, no te enfades cuando estás llorando tanto. Era una broma. Sólo estaba bromeando. Morizawa-san trató de calmarse mientras se limpiaba las lágrimas de la cara. Respiró profundamente y se tranquilizó.

“Está bien. Entonces, ¿qué se te da bien a ti? Ya que eres un Demonio debes tener algún tipo de poder misterioso, ¿verdad? Sólo para que lo sepas, Koneko-chan es extremadamente fuerte. Es capaz incluso de levantarme.”

Lo dijo como si estuviera orgulloso. ¿Dónde está tu orgullo masculino? Así que hay gente que se siente bien por ser levantado en brazos por una chica. ¿Mi habilidad especial? Hmmmmmm.... Me crucé de brazos y dije muy seriamente.

“Puedo hacer el kamehameha.”

“Muérete.”

“¿¡Qué!? ¿¡A qué viene esa respuesta!? ¡¡Lo has dicho como si lo pensaras de verdad!!”

“¡Pues claro que lo digo de verdad! ¿¡Cómo podría un Demonio usar el kamehameha!?”

“¡Pues yo puedo! ¡Yo!”

Me señalé a mí mismo y se lo dije claramente.

“¡Entonces hazlo!”

“¡Lo haré!”

“¡Si puedes hacerlo, adelante! ¡No menosprecies a la generación que ha crecido viendo bola de dragón! Cuando estaba en primaria todos los lunes nos poníamos a practicar para lanzar kamehameha. Incluso tratamos de reunir fuerza espiritual para poder usar la ‘Bola Genki’(14), ¡pero no pasó nada! ¡No te atrevas a mirar por encima del hombro a los de mi generación!”

“¡Cierra el pico! ¿¡A quién le importa que hayas crecido viendo Bola de Dragón!? ¡Yo me compré todo el manga! ¡Hasta me compré el nuevo que sacaron, lo tengo de la primera edición! ¡También jugaba al escondite con mis amigos intentando sentir el ki(15) de los demás!”

Le contesté a todo lo que me dijo. ¡Estaba cabreado! ¡Pues ahora ibas a ver! ¡Te voy a mostrar la versión del kamehameha de Hyoudou Issei! ¡Activaré mi Artefacto Sagrado! Primero cerré los ojos y levanté el brazo izquierdo. Me imaginé a Son Goku y bajé el brazo. Entonces hice la misma postura que la del kamehameha. ¡Puse toda mi energía en ello! ¡Maldita sea! ¡Chúpate esta, generación de Bola de Dragón! ¡Este es mi ataque definitivo!

“¡Kamehame-haaa!”

¡Flash! ¡Mi brazo izquierdo empezó a brilla instantáneamente! El guantelete rojo apareció sobre mi mano, ¡Échale un vistazo! ¡Este es mi artefacto sagrado! Entonces miré a Morizawa-san y estaba... llorando. Entonces cogió el primer tomo de Dragon Ball de su estantería. Me agarró de la mano y nos dimos un varonil apretón de manos.

“¡Hablemos de ello!”

Eso era suficiente para saber lo que estaba intentando decir. Cualquier fan de Bola de Dragón habría entendido a lo que se refería.

“¡Sí, hablemos de ello!”

Allí empezó una larga noche.

“Jajajaja. A mí también, También creo que fue una buena decisión que Oimoto-san (Wakamoto Norio) doblase a Célula.”

“Sí. Sonaba como siempre imaginé que lo haría.”

Después de sacar el manga, estuvimos hablando y riendo dos horas. Mientras hablábamos, olvidamos la diferencia de edad entre los dos y acabamos haciéndonos amigos. Fufufufu. La primera impresión que tuve fue mala, pero cuando empezamos a hablar pudimos conocernos mejor el uno al otro.

“¡Vale! Quizá debería firmar un contrato también contigo...”

“¡Sí, señor! ¡Gracias por el contrato!

¡Síiiiii! ¡Sí! ¡Sí! ¡Sí! ¡Al fin mi primer contrato! ¡Mi camino hacia el título nobiliario había empezado! ¡Aquí era donde iba a nacer mi leyenda!

“Bueno, puede ser un deseo bastante típico pero... ¿puedo desear ser rico?”

Sin duda, era un deseo bastante habitual entre la gente.

“Bien, voy a comprobarlo.”

Saqué el aparato portátil que llevaba e introduje su deseo. Entonces apareció la respuesta.

“Ummmmm... En tu caso, para cumplir ese deseo, el precio sería tu vida. Dicho de otra forma, morirías.”

“¿¡Moriría!?”

“Sí. Lo siento mucho, pero en el mundo de los Demonios se dice que no todas las vidas valen lo mismo. Así que, en tu caso, Morizawa-san, para volverte rico tendrías que morir.”

“Parece como si acabaran de arrancarme el corazón. Pero no pasa nada. En cualquier caso, si hiciera ese deseo, ¿cuando moriría?”

“Ummmmm. Morirías tan pronto como empezara a caer dinero del cielo. Parece que no llegarías ni a tocarlo. Es horrible.”

“¡¡Vaaaaya!! ¿¡Entonces no sería capaz ni de tirártelo a la cara!?”

“Oye, ni intentes golpearme con eso.”

Hmmmmm. Acababa de presenciar como el deseo de alguien se hacía añicos. Pero justo como pensaba, para Morizawa-san era un deseo que era prácticamente imposible con su vida actual. Así que a esto era a lo que se refería Rías-Buchou cuando dijo que no todas las vidas valían lo mismo. Vaya mundo más injusto en el que vivimos.

“Entonces... ¿qué tal un harén? ¿Cómo me saldría desear tener un suntuoso festín de chicas?”

¡Oh! Así que ahí es dónde querías llegar, ¿eh? Estaba tremendamente conmovido. Después de todo, era un hombre, así que estaba claro que podría desear algo como eso.

“Morizawa-san, ¡a mí también me encanta la idea del harén! ¡Es el sueño de todo hombre! ¡Impresionante! Me gustaría que algún día pudiéramos salir a echar un trago, ¡aunque sea menor!”

“No me importaría. Y bien, ¿cómo va?”

Introduje su deseo en el aparato. Vaya, es una respuesta un poco dura.

“Bueno, esto dice que morirías tan pronto como las chicas estuvieran a la vista.”

“Espera, ¿¡entonces moriría sin llegar siquiera a verles las caras!?”

“Exacto, dice tan pronto como llegues a verlas. Tío, eso sería muy duro. Ni siquiera podrías decir como estarían. ¿Para eso no es mejor ver algunas tías mientras das una vuelta por la ciudad?”

“¡¡Hwaaaah!!”

De repente, Morizawa-san, todo un adulto, empezó a llorar.

“¿¡Es que mi vida vale tan poco...!? Perdón por haber nacido...”

Le di unas palmaditas suavemente en el hombro a Morizawa-san.

“Vamos a seguir con lo de Bola de Dragón. ¿Quieres que nos echemos un rol? Yo seré Goku y tú... podrías ser Freezer. ¿Vale?”

Morizawa-san asintió con la cabeza mientras lloraba. Por esto no pude realizar mi primer contrato, tuve que ocuparme de mi cliente.

(14).- Técnica de Dragon Ball en la que Goku reúne energía de todos los seres vivos para formar una bola enorme de energía.

(15).- El Ki es la fuerza de cada persona. Equivale al Chakra en Naruto, el Reiatsu en Bleach, etc...


Parte 4

Al día siguiente, después de clase.

“............”

Rias-buchou estaba decepcionada. Tenía la ceja levantada y no dijo ni una sola palabra. Yo me encontraba delante de ella, con la cara pálida. Ayer estuve jugando a Bola de Dragón con un cliente y terminé por pasar allí toda la noche. Ah sí, Kiba dijo algo como “Nunca había pasado algo así” y no paró de reírse en todo momento.

“Ise...”

El tono de su voz era bastante profundo y parecía estar enfadada.

“¡Sí!”

“Hablaste con el cliente de manga, ¿y qué pasó después de eso? ¿Qué pasó con el contrato?”

Iba directa al grano. Empecé a sudar.

“No pude hacer un contrato... ¡Estuvimos interpretando rol hasta que se hizo de día!”

“¿Rol?”

“¡S-Sí! Cada uno elegía un personaje del manga y actuábamos como si estuviéramos combatiendo.”

¿Por qué tenía que explicarle todo esto tan seriamente? Empecé a tener ganas de echarme a llorar.

“¡Sé que como estudiante de instituto... no, como Demonio profesional, debería avergonzarme! ¡Me arrepiento de mi conducta! ¡Lo siento mucho!”

Incliné mi cabeza después de disculparme. En serio, ¿¡por qué acabé jugando a Bola de Dragón toda la noche!?

“Después del contrato, solicitamos al cliente que rellene una encuesta... En él le preguntamos al cliente sobre la satisfacción sobre el contrato recién celebrado. El cuestionario se responde en el panfleto y sus respuestas se recogen justo aquí...”

Rias-buchou me enseñó el papel con las respuestas del cuestionario. ¡Nunca me dijeron que existía algo así! Parece que los Demonios se toman su trabajo muy en serio.

[Fue divertido. Era la primera vez que me lo pasaba tan bien. Me gustaría encontrarme de nuevo con Ise-kun. Me gustaría hacer un buen contrato con él la próxima vez.]

“Esta es la respuesta del cliente...”

Estaba conmovido. Morizawa-san... No pude hacer nada... pero tú...

“Es la primera vez que recibimos una respuesta de este tipo. Al principio no estaba segura de lo que debería hacer, por eso es por lo que tenía esa expresión tan extraña.”

¿Rias-buchou no estaba enfadada? Pero lo cierto es que fui incapaz de realizar ningún contrato.

“Para los Demonios, lo más importante es realizar contratos con los humanos que nos invocan y así recibir nuestra recompensa. Así es como han sobrevivido los Demonios desde hace muchísimo tiempo. Esta es la primera vez que me he encontrado con una situación como esta... Como Demonio, has fallado, pero el cliente estaba feliz contigo.”

La cara de Rias-buchou reflejaba su desconcierto, pero pronto cambió a una sonrisa.

“Pero es interesante. Podrías convertirte en el número uno en cosas inesperadas. Pero acuérdate de las reglas básicas. Realizas un contrato con el cliente y cumples sus deseos. Una vez hecho esto, recibes su recompensa. ¿De acuerdo?”

“¡Sí, me esforzaré al máximo!”

Rias-buchou perdonó mis actos. Gracias a eso me sentía muy feliz. Buchou, ¡la próxima vez voy a conseguirlo! ¡Sin duda!


Parte 5

El mismo día en el que prometí esforzarme al máximo.

Iba a empezar de nuevo con mi trabajo. Era medianoche y volvía a pedalear a toda velocidad hacia la casa del cliente. Esta vez me dirigía a una mansión que estaba a una media hora del instituto. Aunque intenté ir lo más rápido posible, acabé tardando los treinta minutos exactos en llegar allí. Espero que el cliente no estuviera enfadado. Me acerqué hasta la puerta y toqué el timbre. Es triste que exista un Demonio como que necesite ir por la vida llamando a las puertas. Tenía muchísimas ganas de conseguir ser invocado a través de un círculo de teletransporte, Al poco, obtuve una respuesta desde un telefonillo.

“Está abierto-nyo. Entra-nyo.”

Era una voz bastante grave. ¿Será un tío? ¿Huh? ¿Nyo? ¿Acaba de decir -nyo? No, he tenido que oír mal alguna cosa. Abrí la puerta y dejé mis zapatos en la entrada. Entonces fui hasta la habitación con una sensación de intranquilidad. Cuando abrí la puerta, me quedé mudo.

“Bienvenido-nyo.”

Había un cuerpo descomunal con una presencia inigualable. Era un tío enorme con unos músculos increíbles que iba vestido con un disfraz de gothic-lolita. Miré cuidadosamente y vi como los botones del disfraz estaban a punto de salir disparados y que había lugares donde la tela estaba a punto de rasgarse. Además, tenía los ojos puros como los de un bebé, aunque me sentía como si estuvieran a punto de asesinarme. No... lo más raro de todo era su cabeza. Llevaba orejas de gato. Tragué saliva y noté como me caía una gota de sudor por la mejilla. Empezaron a temblarme las manos porque estaba poniéndome nervioso. Eso no era un tío... ¡era un tío entre tíos! Sentí como si estuviera delante de mi propia tumba sólo de la presión a la que me sometía su simple presencia.

“Ummmmmm... Esto... ¿Has... invocado a un Demonio... de los Gremory...?”

Pregunté sólo por si acaso. ¡Flash! Los ojos de aquel tío empezaron a parpadear haciendo un sonido intermitente cada vez. Sentía como si estuviera llevándose a cabo una dura pelea entre ambos. ¡Iba a destruirme! ¡Que alguien me ayude! Aunque fuera un Demonio, cambié mi postura para enfrentarme a él.

“Sí-nyo. He sido yo quien te invocado, Demonio-san, porque hay un deseo que quiero que me concedas-nyo.”

Unas inesperadas palabras salieron de su boca. Siempre terminaba todas las frases con –nyo... ¡No puede ser! ¿¡Quién le ha permitido hacer algo así!?

“Mil-tan quiere convertirse en una magical girl-nyo.”

“Entonces deberías marcharte a otra dimensión.”

Contesté rápidamente a su deseo. Era imposible. En serio, es imposible. Tenía una confusión enorme encima sólo de pensar en el deseo que quería que le concedieran. ¿¡Mil-tan!? ¡Todo lo que decía este tío me provocaba dolor de cabeza! ¡Con ese cuerpo serías capaz de ir a otra dimensión y volver sin tener ni un sólo arañazo! Probablemente sería capaz de matar al mismísimo Satanás.

“Ya lo he intentado-nyo.”

“¿¡En serio ya lo has intentado!?”

“Pero fue imposible-nyo. Mil-tan no ha encontrado a nadie que le quiera enseñar magia-nyo.”

“Bueno, en otras palabras, parece que lo quieres es tener algún tipo de poder mágico...”

“La única opción que me quedaba era preguntar a mis archienemigos, los Demonios-nyo.”

Por alguna razón pensaba que los Demonios eran sus archienemigos... Bueno, intentaré no involucrarme mucho con eso.

“¡Demonio-san!”

La habitación fue sacudida por el sonido de la voz de Mil-tan. ¿¡Qué fue eso!? ¿¡Magia sónica!?

“¡¡Por favor, dale a Mil-tan unos poderes fantásticos-nyo!!”

“¡No te preocupes, ya eres lo bastante fantástico! ¡Soy yo el que debería estar a punto de llorar!”

Tenía ganas de llorar. ¡Maldita sea! ¿¡Por qué era el único en encontrarse con estos raritos!? ¿¡Cuál era el motivo de esto!?

“¡Mil-tan! ¡¡Mil-tan!! ¡Tranquilízate! ¡Escucharé lo que tengas que decirme!”

Lo primero era lo primero. Necesitaba calmar a aquel tipo y escuchar su historia. Mil-tan puso la sonrisa más grande que había visto en la vida mientras le brotaban lágrimas de los ojos.

“Entonces vamos a ver ‘Magic Girl Milky Spiral 7 Alternative’ juntos-nyo. La historia de las magical girls empieza aquí-nyo.”

Allí empezó una larga noche...


Parte 6

Al día siguiente.

Después de las actividades cotidianas del club, me fui a casa. Sigh... Rias-buchou tenía hoy también una expresión extraña porque no había conseguido ningún contrato dos días seguidos. Pero recibí la mejor calificación en los cuestionarios. Rías-buchou estaba confusa porque se había topado con una situación que no había experimentado antes y encima dos días seguidos. Lo siento por involucrarte en una situación tan extraña. Me sentía mal, pero mi camino hacia un título nobiliario parecía que iba a ser una ardua tarea... La noche anterior estuve viendo DVD de anime hasta que se hizo de día. Al principio no me tomé muy en serio de lo ver un anime de magical girls, pero tenía algunas escenas muy buenas que me hicieron interesarme más y acabé viendo anime toda la noche. Aparte de todo eso, ¿por qué todos mis clientes eran unos tíos tan raros?

“Jajaja. Hyoudou-kun tiene que tener algún tipo de poder mágico que atrae a la gente así.”

Algo así dijo Kiba con su sonrisita de siempre... ¡Muérete, jodido Casanova! Al parecer, la mayoría de los clientes que le invocaban a él eran mujeres guapas. ¡Maldita sea! ¿Qué tipo de deseos le solicitarán? ¿Sexo? ¿¡Algo que tenga que ver con sexo!? ¡Sólo de pensarlo me daban ganas de asesinarlo! ¡Mierda! ¡Maldito seas, Kiba!

“¡Hawaaa!”

¿Huh? De repente escuché una voz. Por lo que escuché parecía venir de detrás y además se escuchó el sonido de algo cayendo al suelo. Cuando me giré había una monja en el suelo. Sus brazos estaban ocupados, por lo que parece que aterrizó con la cara. Era una manera muy poco elegante de caer.

“Ummmm... ¿estás bien?”

Me acerqué a la monja y le ofrecí la mano.

“Awwwww. ¿Por qué siempre me ando tropezando por ahí...? Oh, lo siento. Muchas gracias.”

Por su voz parecía ser bastante joven. Podría tener la misma edad que yo. La cogí de la mano y la ayudé a levantarse cuando una ráfaga de aire se llevo su velo.

Su pelo rubio, que estaba recogido debajo del velo, cayó sobre sus hombros. Su melena rubia empezó a brillar debido a la luz del sol. Entonces, mi vista se desvió hacia su cara. Conquistó mi corazón en un instante. Había una preciosa chica rubia justo delante de mí. Sus ojos verdes eran tan preciosos que parecía como si intentasen arrastrarme hacia ellos... Por un momento me quedé mirándola con la boca abierta.

“Ummm, ¿pasa algo...?”

La monja me miró directamente a la cara con una expresión preocupada.

“Oh, lo siento... Ummm...”

No podía encontrar las palabras adecuadas para contestar. No podía confesarle que me sentía atraído por su belleza. Pero era... pues eso. Sí, hablo de eso. Exacto, eso. ¡Era exactamente igual que mi ideal de chica rubia! ¡Pues claro que me sentía atraído hacia ella! Sentía como si tuviera que seguir hablando con ella. ¡Quizá era una señal! Estaba teniendo todos estos pensamientos tan egoístas. Entonces miré su hombro y vi que estaba llevando una bolsa de viaje. Si lo pensaba lógicamente, era raro ver a una monja en esta ciudad. Era la primera vez que veía una, de hecho. Antes de nada, recogí su velo del suelo. Afortunadamente había Caído bastante cerquita.

“Ummmm, ¿de viaje?”

“No, no es eso. Me han asignado a la iglesia de esta ciudad. Tú debes vivir por aquí. Encantado de conocerte.”

Inclinó su cabeza. Hmmmm. Así que la han transferido a la iglesia de esta ciudad. ¿Recolocación de personal? Parece que la Iglesia también estaba bastante ocupada, ¿eh?

“Estaba preocupada desde que llegue aquí. Ummmmm... no sé hablar japonés demasiado bien... estaba perdida y nadie parecía entender lo que decía...”

Se puso la mano en el pecho y parecía realmente apenada. Así que esta chica no sabía hablar japonés... La razón por la que puede hablar conmigo es por un poder demoniaco. Eso es lo que me dijo Rias-buchou.

“Cuando te conviertes en un Demonio obtienes una habilidad única llamada ‘Idioma’. En el mismo momento en el que te transformas en uno, todos los habitantes del mundo serán capaces de entender lo que estás diciendo. Si son norteamericanos, te escucharán hablar en inglés. Si son españoles, te escucharán hablar español. Y al contrario, si ellos hablan en otro idioma, tú lo escucharás en japonés.”

Sí, estaba pasando justo lo que me dijo Rias-buchou. En la clase de inglés escuchaba todo en japonés. Estaba sorprendido. Cuando el profesor de inglés me mandó que leyera un texto en clase, de algún modo fui capaz de leerlo. Todos mis compañeros se quedaron asombrados. Claro que ya podían, ahora que hablaba inglés de forma fluida. Hasta el profesor se quedó de piedra. Bueno, las letras y el vocabulario no cambiaba a japonés porque esto se limitaba a hablar, pero ya era lo suficientemente bueno si pensabas que podías entender cualquier idioma en el mundo. Sólo con eso ya me podría haber convertido en un estudiante internacional

“Creo que sé donde está la iglesia.”

Creo que había una antigua iglesia que estaba en las afueras de la ciudad. Supongo que se referiría a esa. Pero, ¿acaso seguían usando aquella iglesia?

“¿¡Sí!? ¡Gracias! ¡Todo esto es gracias a Dios!”

Me dedicó una sonrisa preciosa mientras casi le caían las lágrimas por el rostro. Era realmente preciosa. Pero cuando miraba el rosario que llevaba en el pecho, me daba una sensación tremendamente mala. Bueno, estaba claro que lo haría, dado que soy un Demonio. Ella es del tipo de humanos con el que no debería verme involucrado, pero no podía dejar a una pobre chica en apuros. Así, tomé la decisión de llevar a aquella chica hasta la iglesia.

Mientras nos dirigíamos hacia la iglesia pasamos por un parque.

“¡Uwaaaah!”

Lo que oímos era un niño llorando.

“¿Estás bien, Yosh-kun?”

Como el niño estaba con su madre no debería pasar nada. Por lo que se ve simplemente había tropezado. Pero de repente, la monja que iba andando a mi lado se dio la vuelta y se dirigió hacia el parque.

“Oye.”

La monja entró en el parque y fue directamente hacia el niño, que seguía llorando. Yo iba detrás de ella.

“¿Estás bien? Un hombre no debería llorar por una heridita como esta.”

La monja le dio unas palmaditas en la cabeza. El chico probablemente no entendió lo que le dijo, pero la hermana tenía una expresión amable. La monja apoyó sus manos donde tenía la herida el chico. Al momento empecé a alucinar. Una luz verde había salido de las palmas de sus manos y estaba iluminando la rodilla del niño. ¿Qué era eso? ¿Era magia? Rias-buchou me dijo que era algo que sólo podía ser utilizada por los Demonios y gente relacionada con ellos. Cuando me fijé con atención, vi como la herida del chico empezó a desaparecer. ¿Era aquella luz la que estaba curando a aquel chico? De repente me vino algo a la cabeza. Era un Artefacto Sagrado. Un poder especial que le era otorgado a determinadas personas. Creo que eso es lo que me dijo Kiba una vez. De algún modo, sentí que se trataba de eso. Cuando miraba la luz notaba como me dolía mi brazo izquierdo. Tenía que haber alguna relación. ¿Estaría reaccionando mi Artefacto Sagrado con el suyo? Cuando volví a mirar, la herida ya había desaparecido por completo de la rodilla del niño. No quedaba ni rastro de ella. Impresionante. Ese era el poder de un Artefacto Sagrado... Había de todo tipo. La madre del niño estaba sorprendida. Cualquiera que hubiera visto algo así habría puesto la misma cara.

“Ala, ya se ha curado. Ya no debería doler.”

La monja le dio unas palmaditas al niño en la cabeza y me miró.

“Lo siento, tenía que hacerlo.”

Se rió mientras sacaba la lengua. La madre del chico, que hasta el momento se había quedado sorprendida, movió la cabeza y cogió la mano del niño para alejarse rápidamente.

“¡Muchas gracias, hermana!”

Las palabras del chico estaban repletas de gratitud.

“Ha dicho: ‘Muchas gracias, hermana’.”

Sonrió después de que se lo tradujera.

“Ese poder...”

“Sí, es el don de sanar. Es un poder especial que Dios me ha concedido.”

Parecía estar triste aunque estuviera sonriendo. ¿Cómo podría explicarlo? Parecía que tenía un pasado oscuro. Probablemente no debería hurgar demasiado en él.

No era el tipo de situación propicio para decirle “¡Mira, en realidad yo también tengo un Artefacto Sagrado en el brazo!” Era un poder inusual y mucha gente podía sufrir por ello. Incluso yo no estaba demasiado cómodo cuando mi Artefacto Sagrado me cubría todo el brazo. En vez de eso, estaba algo confundido. Aún no sabía cómo usar mi Artefacto Sagrado, así que no estaba para nada contento con ello. La única cosa que podía hacer era imitar la pose del kamehameha. La conversación terminó allí y seguimos andando hacia la iglesia. Llegamos allí después de andar unos minutos. Sí, la única iglesia que conozco es esta. Era tan vieja como la recordaba. A decir verdad, nunca habría dicho que estaba en uso, pero podía verse luz en el interior, lo que significaba que había gente dentro.

Empecé a encontrarme mal y notaba como empezaba a sudar. En realidad, era lo mismo de antes. Lo sabía. Soy un Demonio, así que una iglesia, que es un territorio perteneciente a Dios y los Ángeles, sería territorio enemigo para mí. Rias-buchou ya me dijo que nunca debería acercarme a una iglesia o un santuario.

“¡Sí, este es el sitio! ¡Gracias a Dios!”

La hermana mostró un suspiro de alivio cuando comparó aquel lugar con el mapa que tenía. Oh, así que sí que era aquí. Qué bien. No debería quedarme allí mucho más tiempo. Estaba oscureciendo, así que tenía que marcharme. Era una pena tener que despedirse de una belleza como ella, pero yo era un Demonio y ella una monja... El amor entre bandos opuestos podía sonar romántico, pero este caso era distinto... Estaba empezando a sentirme inquieto por la presencia de la iglesia y mi cuerpo no dejaba de temblar. ¿Esta señal de miedo es una característica especial de los Demonios? Sentía como si estuviera siendo observado por una serpiente.

“Bueno, pues yo me voy ya.”

“Espera, por favor.”

Traté de separarme de ella, pero sus palabras hicieron que me detuviera.

“Me gustaría ofrecerte un poco de té...”

“Oh, es que tengo un poco de prisa, así que me tengo que ir.”

“Pero yo...”

Estaba preocupada. Probablemente quería hacerme un poco de té para mostrarme su gratitud, pero para mí era peligroso entrar allí dentro. Era una lástima, pero tenía que rechazar su propuesta.

“Me llamo Hyoudou Issei, pero todos aquí me llaman Ise, así que puedes llamarme así. ¿Cómo te llamas?”

Cuando le dije mi nombre, sonrió.

“¡Mi nombre es Asia Argento! ¡Por favor, llámame Asia!”

“Entonces, hermana Asia, volvamos a vernos.”

“¡Sí, Ise-san! ¡Seguro que volvemos a vernos!”

Asia inclinó su cabeza. Abandoné aquel lugar mientras me despedía agitando la mano. Ella se me quedó mirando hasta que me perdió de vista. Sabía que era una buena persona y aquel fue nuestro primer encuentro, fruto del destino.


Parte 7

Aquella noche.

“Ni se te ocurra volver a acercarte a una iglesia.”

Estaba recibiendo la regañina de Rias-buchou en la sala del club. Su cara parecía más seria de lo normal. Más bien, es que me estaba gritando mucho.

“Para los Demonios, la iglesia es territorio enemigo. Sólo con acercarte a una podrías causar un conflicto entre los Demonios y Dios. Como fue un acto de bondad lo de llevar a aquella monja hasta la iglesia, no te pasó nada. Pero los Ángeles siempre están vigilantes y tú estabas en una situación en la que no habría sido extraño que te hubiera atravesado una lanza de luz.”

¿En serio...? ¿Estaba en una situación tan seria? Si pensaba en ello, los escalofríos que me daban no eran para nada normales. Aquella vez sólo pude sentir miedo. Así que eso es lo que significa sentir el peligro. Mis instintos demoniacos me advirtieron de que estaba en una situación peligrosa.

“No te involucres con gente de la Iglesia, en especial con los Exorcistas. Ellos son nuestros mayores enemigos. Pueden eliminarnos fácilmente porque sus poderes reciben el apoyo directo de Dios. Y más aún si es un exorcista con un Artefacto Sagrado. Eso sería lo mismo que encontrarse ante una muerte inminente, Ise.”

Rias-buchou me miraba directamente con sus ojos azules mientras su pelo rojo ondeaba. Su mirada era seria, así que lo que dijo no era ninguna broma.

“¡S-Sí!”

“Pudiste evitar morir como un humano renaciendo como un Demonio, pero los Demonios que son exorcizados desaparecen por completo. Vuelven a la nada. Nada. No dejan rastro alguno y no sienten nada. ¿Sabes como de serio es esto?”

¿Volver a la nada...? A decir verdad, no lo entendía. Rias-buchou sacudió la cabeza después de ver que no acababa de entenderlo.

“Lo siento, me he calentado demasiado. En cualquier caso, ten cuidado de ahora en adelante.”

“Sí.”

Mi conversación con Rias-buchou terminó ahí.

“Vaya, ¿has terminado ya de reprenderle?”

“¡Vaya!”

Akeno-san estaba justo detrás de mí y ni me había dado cuenta. Estaba sonriendo, como siempre.

“¿Ha pasado algo, Akeno?”

La expresión de Akeno-san cambió cuando escuchó eso.

“Hemos recibido una orden de caza del Archiduque.”


Parte 8

Demonios renegados.

Hay criaturas que son denominadas con ese nombre. El Demonio que es convertido en un sirviente por un Demonio con un título nobiliario pero que traicionó y mató a su maestro. A veces ocurren casos como ese. Los Demonios son tremendamente poderosos. No pueden compararse ni de lejos con un humano corriente. Existían aquellos que utilizaban su poder en su propio beneficio e intereses. Esos Demonios abandonaban el territorio de su maestro y arrasaban las áreas de los alrededores. Eso era un Demonio renegado. Por esa razón, aquel Ángel Caído del traje me confundió con uno de ellos. En otras palabras, eran como perros callejeros. Los perros callejeros acababan causando problemas. Cuando eran localizados, se ordenaba a su maestro o a otros Demonios la tarea de eliminarlo. Esa era la ley de los Demonios. Incluso los demás, como los Ángeles o los Ángeles Caídos los veían como una amenaza y acababan con todos los Demonios renegados que encontraban a su paso. No hay nada más aterrador que un Demonio que no respetaba norma alguna.

Fui a una especie de edificio abandonado a las afueras de la ciudad con Rias-buchou, Akeno-san, Kiba y Koneko-chan. Allí había un Demonio renegado que estaba guiando a algunos humanos hacia el interior cada noche para alimentarse de ellos. Por ello, había una orden de los Demonios de alto nivel para acabar con él.

[Ha huido al territorio de Rias Gremory, así que me preguntaba si podríais haceros cargo de él.]

Al parecer, ese era otro de los trabajos de los Demonios. Comer humanos... también había Demonios malignos como esos... No, normalmente así es como son los Demonios... Entonces, ¿la única razón por la que están tranquilos es para obedecer las normas? ¿Y si no había ninguna ley que respetar?

Sí, realmente un Demonio...

Era medianoche y estaba todo completamente a oscuras. Había un montón de césped alto rodeándome, pero podría ver el edificio en ruinas desde allí. Esa era una de las características especiales de los Demonios, ver con total claridad en la oscuridad. Hmmmm... Tener una buena vista sobre un edificio tenebroso tampoco era tan bueno...

“Huele a sangre...”

Me tapé la nariz con el cuello del uniforme después de que hablara Koneko-chan. ¿Olor a sangre? Yo no podía oler nada, pero Koneko-chan parecía tener un buen sentido del olfato. Todo estaba calmado, pero podía sentir la presencia de un enemigo en las cercanías y sus deseos de acabar con nosotros no eran normales. Me temblaban las piernas. Estaba realmente asustado. Si los demás no hubieran estado allí yo ya habría salido huyendo. ¡Rias-buchou, que estaba situada al frente con las manos apoyadas en las caderas, parecía estar completamente confiada!

“Ise, esta es una buena oportunidad para que experimentes lo que es un combate de verdad.”

Rias-buchou me estaba proponiendo algo difícil de aceptar.

“Espera, ¿¡en serio!? ¡Estoy seguro de que no seré de mucha ayuda!”

“Sí. Aún es imposible que puedas ayudar mucho.”

Me lo dijo directamente. Me sentí un poco triste.

“Pero podrás ver como es un combate entre Demonios. Hoy concéntrate en ver como luchamos. Ah sí, también te explicaré las habilidades que tienen los sirvientes.”

“¿Explicar? ¿Las habilidades de los sirvientes?”

Estaba poniendo cara de no entender demasiado, pero Rias-buchou siguió hablando.

“Los Demonios que se convierten en amos otorgan unos poderes específicos a aquellos que convierte en sus sirvientes. Sí, probablemente ya sea hora de explicarte algo sobre la historia de los Demonios...”

Rias-buchou empezó a explicarme la situación actual de los Demonios.

“Hay una guerra a tres bandas entre los Demonios, los Ángeles Caídos y Dios con sus Ángeles. Los tres bandos tenían grandes ejércitos y han luchado desde siempre. Como resultado, todos los bandos sufrieron grandes pérdidas y la guerra terminó hace unos cuantos siglos sin que nadie se proclamase vencedor.”

Kiba continuó después de Rias-buchou.

“Los Demonios tampoco son una excepción. Los grandes nobles de los Demonios que comandaban tropas de veinte o treinta miembros perdieron la mayoría de sus subordinados. Perdieron tantos que ya no eran capaces de formar nuevos ejércitos.”

Akeno-san continuó desde allí.

“Escuché que la mayoría de los Demonios de linaje puro fallecieron en aquella guerra. Pero después de aquella guerra, seguía habiendo enfrentamientos entre los tres bandos. Aunque los Ángeles Caídos y Dios también perdieron gran parte de sus tropas, aún estamos en una posición en la que no podemos permitirnos bajar la guardia o estaremos en problemas.”

Entonces, Rias-Buchou habló de nuevo.

“Así pues, los Demonios decidieron usar un sistema para formar pequeños batallones de soldados. De ahí salen las ‘Piezas Demoníacas’.”

“¿Piezas Demoníacas?”

Parecía que todo se iba complicando, pero por lo que se ve tenía que escuchar todo con atención.

“Los Demonios de la nobleza decidieron otorgar las habilidades del juego humano llamado ajedrez a sus sirvientes. Puede parecer irónico porque la mayor parte de los sirvientes son humanos que han renacido como Demonios. Desde entonces, el ajedrez se volvió un deporte popular en el mundo de los Demonios. Dejaremos eso a un lado. Los Demonios que son amos, se representan con el ‘Rey’. En nuestro caso, soy yo. A partir de ahí, crearon cinco tipos de habilidades basados en la ‘Reina’, la ‘Torre’, el ‘Caballo’, el ‘Alfil’ y el ‘Peón’. Como no podían formar grandes ejércitos, decidieron crear pequeños grupos de Demonios con un poder enorme. Este sistema se instauró hace cientos de años e inesperadamente se hizo popular entre la nobleza.”

“¿Popular? ¿Te refieres al juego del ajedrez?”

“Empezaron a competir unos contra otros. Por ejemplo con cosas como ‘¡Mi ‘Caballo’ es más fuerte!’ o ‘¡No, mi ‘Torre’ es mucho más fuerte!’. Como consecuencia, la élite de los Demonios empezó a jugar a algo parecido al ajedrez pero utilizando sus sirvientes. A eso se le dio el nombre de ‘Juego clasificatorio’. En cualquier caso, es un juego muy popular entre los Demonios. Ahora incluso se crean campeonatos para jugarlo. La fuerza de sus piezas y su propia fuerza al jugarlo afectan a la posición social de los Demonios y su propio título nobiliario. Hay una clase llamada ‘Pieza de colección’ donde se reúnen los humanos con talento y se los convierte en piezas. Últimamente se está poniendo de moda. Muchos sirvientes talentosos han alcanzado dicho estatus.”

Ya veo. Así que ser bueno jugando a eso significa que eres un Demonio genial. También es algo que se convierte en un orgullo. Ummmmm.... Así que los sirvientes anteriormente eran humanos y se han ido convirtiendo en piezas para dicho juego. Se nota que es algo bastante complicado. Entonces, ¿algún día me obligarán a verme involucrado en un juego así?

“Yo aún no soy un Demonio adulto, por lo que no puedo participar en los torneos oficiales. Y aunque pudiera, aún hay unas cuantas cosas que necesito para ello o no podría jugar. En definitiva, ni Ise ni ninguno de mis sirvientes aquí participaremos en ello, al menos de momento.”

“¿Quiere eso decir que ni Kiba ni los demás han jugado alguna vez?”

“Exacto.”

Kiba respondió a mi pregunta. Hmmmmm... El mundo de los Demonios es bastante extraño. Antes solía imaginármelo como algo maligno y terrible, pero parece que mis imaginaciones no eran para nada correctas. O quizá eso era lo que pensaba ahora porque aún no conocía la manera en la que se hacían las cosas en el mundo de los Demonios. Antes de eso, había algo que me estaba picando la curiosidad. Sí, ¿qué pieza era yo?

“Buchou, ¿cuál es mi posición y mi habilidad? ¿Qué pieza soy yo?”

“Ise, tú eres...”

Rias-buchou se paró ahí. Yo también sabía por qué lo había hecho. Sentía un escalofrío que me recorría todo el cuerpo. Eso era debido a la presencia del enemigo y su deseo de matarnos, que se había hecho mucho más fuerte. ¡Algo se estaba aproximando hacia nosotros! Incluso un recién transformado como yo era capaz de sentir algo así.

“Puedo oler algo asqueroso, pero también hay algo delicioso. ¿Es dulce? ¿O amargo?”

Se escuchó una voz baja, como si viniera de debajo del suelo. Era tan rara que sólo de oírla ya estaba asustado.

“Demonio renegado Vaizor. Hemos venido a eliminarte.”

“Kwakwakwakwakwa...”

Aquella risa tan anormal resonó a nuestro alrededor. Aaaaah, ahora lo entendía todo. No era la risa de un humano. Pero tampoco era una risa de Demonio, hasta donde yo sabía. Ummmm... Algo surgió de entre las sombras. Era una mujer con los pechos al descubierto. Pero el cuerpo de la mujer estaba flotando. No... se oían unas pisadas muy pesadas. Lo siguiente que apareció de aquellas sombras era el cuerpo de una bestia gigante. Era una criatura grotesca que estaba formada por la parte superior del cuerpo de una mujer y la parte inferior de un monstruo horrible. Llevaba algo parecido a una lanza en ambas manos. La parte inferior tenía cuatro piernas gordas con unas garras afiladas. ¿Eso es una cola de serpiente? ¡Vaya! ¡La cola se movía por su propia voluntad! Por la forma que tenía, diría que la criatura medía más de cinco metros de alto, pero si se ponía sobre sus patas traseras sería mucho más alta, ¿no? En cualquier caso era un monstruo. ¿Eso también era un Demonio? Bueno, como Rias-buchou lo llamó “Demonio renegado”... Tío, ¿existen más cosas de este tipo? Me reafirmo en lo que dije. ¡Los Demonios dan mucho miedo!

“Abandonar a tu maestro e ir por ahí arrasando todo a placer definitivamente merece la muerte. ¡En nombre de los Gremory, acabaré encantada contigo!”

“¡¡Eres muy grandilocuente para ser una niñita!! ¡¡Voy a rajarte en canal y dejarte del mismo color que tu pelo!!”

El monstruo estaba gritando a pleno pulmón, pero Rias-buchou simplemente se rió.

“Vaizor habla con mucho estilo... ¡Yuuto!”

“¡Sí!”

¡Zas! Kiba, que estaba a mi lado, se encontraba al lado de Rias-buchou en el mismo momento en que se lo había ordenado. Era increíblemente rápido. ¡Ni siquiera fui capaz de verle!

“Ise, voy a continuar con la lección desde donde la dejamos antes.”

Eso me dijo Rias-buchou. ¿Lección? ¿Se refería a eso sobre las habilidades de las piezas?

“La posición de Yuuto es el ‘Caballo’. Su habilidad especial consiste en la velocidad. Aquellos que se convierten en esta pieza ven como aumenta mucho su velocidad.”

Justo como había dicho Rias-buchou, la velocidad de Kiba estaba incrementándose cada vez más hasta que, finalmente, no podía seguir sus movimientos con los ojos. El monstruo estaba usando su lanza para atacar, pero parecía que no veía ni donde estaba atacando.

“Y el arma definitiva de Yuuto son las espadas.”

Kiba dejó de moverse y de pronto llevaba una espada de aspecto europeo. La sacó de su vaina y el acero desnudo reflejó la luz de la luna. ¡Zas! Kiba volvió a desaparecer. En un instante se escuchó el grito del monstruo.

“¡¡Gyaaaaaaahh!!”

Cuando miré de nuevo, los brazos del monstruo estaban separados del torso sujetando aún la lanza. La sangre brotaba por las heridas.

“Este es el poder de Yuuto. Una velocidad que no puede seguirse con los ojos y unas habilidades de espadachín profesional. Combinando ambas dos, se ha convertido en el ‘Caballo’ más rápido.”

Había una pequeña sombra cerca de las piernas del monstruo... ¡Espera! ¡Si es Koneko-chan!

“La siguiente es Koneko. Ella es una ‘Torre’. La habilidad especial de la ‘Torre’ es...”

¡Pummm! ¡Aquel monstruo gigantesco intentó aplastar a Koneko-chan! ¡Ko-Koneko-chan! No, ¡está en apuros...! Pero la pata del monstruo no llegó a tocar el suelo. No podía ser... Aquella chica estaba sosteniendo a aquel monstruo con su pequeño cuerpo.

“La habilidad de la ‘Torre’ es bastante simple. Una fuerza absoluta y una gran capacidad defensiva. Es imposible que un Demonio de ese nivel pueda aplastar a Koneko. No puede ganarla en fuerza.”

Lo levantó... Koneko-chan levantó completamente a aquel monstruo.

“A volar...”

Koneko-chan saltó muy alto y le asestó un certero puñetazo en el estómago.

¡Plas! El enorme cuerpo del monstruo fue lanzado hacia atrás. Recuerdo lo que me dijo el cliente que estaba enamorado de Koneko-chan, Morizawa-san, ‘Koneko-chan es extremadamente fuerte. Es capaz hasta de levantarme’. ¡Eso no es algo a lo que llamar fuerza extraordinaria! ¡Lanzar volando a ese monstruo de un solo puñetazo, eso sí que lo es! Sí, me aseguraré de no hacer nada que moleste a Koneko-chan. A mí probablemente me mataría de un golpecito con el dedo. Menuda bestia... qué miedo.... aunque Morizawa-san, que se enamoró de ella, también da miedo a su manera...

“Y por último, Akeno.”

Akeno-san iba riéndose mientras andaba en dirección al monstruo que acababa de salir volando con un golpe de Koneko-chan.

“Akeno es la ‘Reina’. Es la más poderosa después de mí. Es la invencible ‘Reina’ que posee los poderes de los ‘Peones’, los ‘Caballos’, los ‘Alfiles’ y las ‘Torre’.”

“¡¡Ughhhhhh...!!”

El monstruo estaba mirando atentamente a Akeno-san, pero esta seguía con una risa despreocupada después de ver que aquella criatura le estaba mirando.

“Vaya, parece que aún te queda algo de energía. Entonces, ¿qué tal si hacemos esto?”

Akeno-san juntó sus manos y dirigiéndolas hacia el cielo... ¡Flash! De repente algo brilló en el cielo y un rayo golpeó al monstruo.

“¡¡Raaaaaarghh!!”

El monstruo recibió el golpe eléctrico de lleno. Su cuerpo entero estaba quemado, hasta salía humo de él.

“Vaya, parece que aún sigues con energías. Vas a ser capaz de recibir un poco más...”

¡Flash! Otro rayo golpeó a la criatura.

“¡¡Gwaaaaaah!!”

La cara de Akeno-san mientras lanzaba aquel rayo tenía una expresión fría y terrorífica, aunque ella seguía riéndose. Tío... Lo estaba disfrutando... Por eso se estaba riendo.

“Akeno es especialista en lanzar ataques mágicos. Puede manejar los elementos naturales, como el rayo, el hielo, el fuego y todo eso. Y por encima de todo, es una sádica.”

Rias-buchou lo dijo como si no fuera nada especial. ¿¡Sádica!? ¿¡Eso no significa que le va el sadismo!?

“Normalmente es muy amable. Pero una vez que empieza el combate, no se detendrá hasta que se quede satisfecha.”

“Snif... Akeno-san me da miedo...”

“No tienes por qué tener miedo, Ise. Akeno es muy amable con sus compañeros, así que no hay ningún problema. Incluso dijo que eras bastante mono. Luego dile que te haga mimos, verás como te abraza cariñosamente.”

“Fufufufufu. ¿Cuántos de mis rayos podrás soportar, monstruo-san? Todavía no puedo dejar que te mueras. La que va a acabar contigo será mi ama. ¡Ohohohoh!”

Buchou... Estoy empezando a tener mucho miedo de la persona que tenía delante de mí y que se reía escandalosamente... Pensé que sería la persona con más sentido común. Bueno, después de todo es un Demonio... Así es como son, ¿no? Como es un Demonio, debe dar miedo, ¿verdad?

Durante unos cuantos minutos, Akeno-san continuó con sus ataques eléctricos. Después de que Akeno-san se tranquilizó, Rias-buchou asintió con la cabeza. Rias-buchou se aproximó al monstruo, que ya había perdido su voluntad de luchar. Puso su mano hacia el monstruo.

“¿Tus últimas palabras?”

“Mátame.”

Eso es lo único que dijo el monstruo.

“¿Sólo eso? Entonces, desaparece.”

Una respuesta inmisericorde. La voz de Rias-buchou hizo que me estremeciera. ¡Boom! Una gigantesca bola mágica negra salió disparada de manos de Rias-buchou. Era lo suficientemente grande como para cubrir todo el cuerpo del monstruo. La bola mágica impactó contra la criatura. Cuando desapareció la esfera negra, tampoco estaba ya el cuerpo del monstruo. Fue exactamente como dijo Rias-buchou, desapareció. Después de comprobarlo exhaló un suspiro.

“Se acabó. Buen trabajo, chicos.”

Eso nos dijo Rias-buchou. Todos habían vuelto a su estado habitual. Así que ya había terminado la cacería, ¿eh? Ese era el destino de los Demonios renegados. No sabía qué decir. Esa criatura había abandonado a su maestro porque tenía algo en mente... Así que esto era una batalla entre Demonios... Fue un combate feroz. Además de sobre los Demonios renegados, aún había muchísimas cosas de las que necesitaba aprender... Así que tendría que apuntar alto desde aquí... Quizá tendrían que pasar décadas, y entonces recordé el problema. Todo el tema de las piezas demoníacas del que estábamos hablando antes. Ya que soy el sirviente de un Demonio de la nobleza, debería ser alguna pieza.

“Buchou, aún hay una cosa que no me has contado.”

“¿El qué?”

Respondió Rias-buchou con una sonrisa.

A decir verdad, ya había previsto que fuera el peor de los casos. Más bien era que eso era lo único que quedaba. Pero aún tenía una débil esperanza. Akeno-san era la ‘Reina’, Koneko-chan era una ‘Torre’ y Kiba era un ‘Caballo’. Así que sólo quedaban dos piezas: el ‘Alfil’ y... el ‘Peón’. Estaba con esperanzas, pero se vinieron abajo enseguida. Aquella preciosidad de pelo rojo me lo dijo directamente.

“Tu eres un ‘Peón’, Ise. Un ‘Peón’.”

Estaba en lo más bajo.

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