sábado, 9 de febrero de 2013

High School DxD - Vol 1 - Vida 0


Bueno, pues no ha sido el jueves como tenía costumbre de hacer pero es que no estaba de humor para andar ocupándome de estas cosas. Pero al lío, estrenamos proyecto nuevo en OMGT: High School DxD. Como algo había que hacer en lo que van traduciendo Kuroko no Basket al inglés, pues me puse a ver qué podía hacer. Encontré estas novelas, cuyo anime vi recientemente, y dije: es una señal. 

A partir de ahora tendré menos tiempo para traducir, pero al menos la primera novela de High DxD ya la tengo traducida entera y también, si alguien se lo pregunta, tengo lo que hay de Replace II de Kuroko no Basket. Al menos podré ir poniendo algo semanal hasta mediados de marzo o así. Intentaré rascar tiempo de donde no hay para traducir en casa y poder seguir trayendo cositas. Pero bueno, aquí os dejo con el primer capítulo, para que vayáis abriendo boca.


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Es el mismo color que el pelo de aquella persona.

Eso es lo que pensé mientras estaba cubierto de sangre. Rojo... Un color escarlata más brillante que el de las fresas. Sí. El bonito y largo pelo carmesí de aquella persona tenía el mismo que color que aquello que estaba cubriendo mi mano.


Vida.0

Me llamo Hyodou Issei. Mis padres y mis amigos me llaman Ise.

Soy un estudiante de segundo año que actualmente está en su plena juventud.

Hay estudiantes con los que no me relaciono mucho que dicen a menudo “¿No es ese Ise?” y hacen que me pregunte cómo saben mi nombre.

¿Que eso es porque soy un tipo popular?

No, no lo soy. Soy famoso porque he sido acusado de haber estado espiando los vestuarios del club de Kendo.

Yo nunca haría algo tan reprobable como espiar el vestuario de las chicas...

Lo siento. Estaba en la escena, en el almacén que está al lado del club de Kendo. Y allí había un agujerito por el que estaba tratando de echar una ojeada.

Por desgracia, no pude ver nada. Todo es culpa de Matsuda y Motohama, que no se separaban del agujero. En serio, estos tíos...

Me estaba poniendo burro y no podía evitarlo porque esos dos idiotas no paraban de decir “¡Ohhhh! ¡Murayama tiene un buen par de peras!” y “Ahhh, qué piernas más bonitas tiene Katase.”

¡Pues claro que quería echar un vistazo! Pero se estaba acercando gente al almacén, así que tuve que salir corriendo de allí.

En cualquier caso, algo bueno iba a pasarle a un chico como yo, que no paraba de hacer cosas pervertidas todo el día.

“Por favor, sal conmigo.”

¡Una chica se me declaró!

En ese momento sentí la felicidad de ser joven.

Para alguien como yo, que no tenía novia, aquello fue un sueño hecho realidad.

El nombre de mi novia era Amano Yuuma. Tenía un pelo negro y sedoso y un cuerpo esbelto.

Era tan guapa que me enamoré de ella a primera vista.

¿No le diríais “Sí” sin pensarlo si una belleza se presentara delante vuestra y os dijera “¡Te quiero, Hyoudou-kun! ¡Por favor, sal conmigo!”?

Eso sería como algo sacado de un sueño para un chico como yo, que nunca se había echado una novia en toda su vida.

No sería nada raro si alguien hubiera dicho “¿De que eroge(1) has sacado a este bombón?, ¡pero es que pasó de verdad!”

¡Ocurrió el milagro! ¡Alguien se me declaró! ¡Y encima era una preciosidad!

En realidad, pensé que se trataba de alguna broma. Incluso pensé que habría perdido alguna apuesta con sus amigas y que nos estaban espiando desde algún sitio.

No podía evitarlo. Hasta aquel momento, pensaba que había nacido para ser impopular entre las chicas.

Pero a partir de aquel día, me había convertido en un chico con novia. El mundo que se extendía a mi alrededor cambió. No sé como explicarlo, pero mi corazón se encontraba en paz. Me habría gustado gritarle “¡Victoria!” a cada tío con el que me hubiera cruzado.

Empecé a sentirme mal por mis dos compañeros, Matsuda y Motohama, que no tenían novia. Así de sobrado iba.

En nuestra primera cita desde que empezamos a salir juntos...

Estaba preparado para utilizar el plan que había preparado un tiempo atrás.

Fufufu, me he lavado los dientes cientos de veces desde ayer por la noche. No me he dejado ningún rincón por lavar. Incluso me he comprado unos calzoncillos nuevos. Sólo por si acaso pasaba “algo”.

Llegué al sitio en el que habíamos quedado con la típica actitud del clásico tío virgen.

Llegué unas tres horas antes. ¡Me dio tiempo a contar más de cien chicas con gafas que pasaron delante de mí!

En todo ese tiempo, una chica de aspecto sospechoso me dio un panfleto.

Era un papelito con un extraño círculo mágico dibujado. Parecía de algo de ocultismo, y llevaba escrita la frase “¡Tu sueño será cumplido!”

Quería haberlo tirado, pero decidí guardármelo en el bolsillo porque no tenía tiempo para perderlo buscando una papelera.

Cuando llegó Yuuma-chan le dije:

“No te preocupes. Yo acabo de llegar.”

¡Bingo! Por fin pude decirlo. ¡Llevaba mucho tiempo queriendo decir eso!

Entonces empezamos a pasear cogidos de la mano. Estaba encantado. ¡Pasar una cita cogiendo la mano de mi preciosa novia!

Estaba tan feliz que estaba a punto de echarme a llorar. No tenía que ir demasiado rápido. Todavía no había llegado el momento de entrar en estado de pánico.

Después de eso, fuimos a algunas tiendas mientras disfrutábamos de la cita.

A la hora de comer, fuimos a un restaurante familiar, como habría hecho cualquier estudiante. De postre, Yuuma-chan pidió un delicioso parfait de chocolate. Yo estaba lleno sólo con mirarla.

Sí, sentía que por fin comprendía como se sentían los adolescentes cuando tenían alguna cita. Era la primera vez que me sentía vivo.

Mamá, gracias por haberme dejado nacer. Papá, temía que nuestra familia no iba a tener más descendencia, pero parece que ya no vas a tener que preocuparte más.

En lo que iba pensando todas estas cosas se hizo de noche. ¡Llegaba el clímax!

¿¡La beso!? ¿¡Un besito antes de volver a casa!? ¡Me estaba poniendo a tope sólo de pensarlo!

¡¡Quizá incluso podríamos llegar más lejos!!

Eso era todo lo que pensaba un joven estudiante pervertido como yo todo el rato.

Estábamos en el parque que estaba a las afueras de la ciudad. No había nadie paseando por allí y tampoco había nadie que nos siguiera. Gracias a esto, mi imaginación se puso a funcionar a pleno rendimiento.

¡Debería haber leído algún libro que te enseñase a hacer cosas aún más pervertidas!

Yuuma-chan me soltó la mano y se dirigió hacia una fuente cercana.

“Me lo he pasado muy bien hoy.”

Yuuma-chan sonreía, con la fuente a sus espaldas.

¡Uff! Joder, qué guapa es. El sol estaba poniéndose justo detrás de ella, creando una buena atmósfera.

“Oye, Ise-kun.”

“¿Qué pasa, Yuuma-chan?”

“Hay algo que quiero para celebrar nuestra primera cita. ¿Escucharías lo que quiero pedirte?”

Oh yeah. ¡Ya está aquí!

¡Es eso! ¡Tiene que serlo!

¿¡Aliento...!? ¡Comprobado! ¿¡Preparación mental...!? ¡Mmmmm...! ¡Se me va a salir el corazón del pecho~!

“¿Q-Qué es lo que quieres?”

Ahhhhhh. ¿¡Pero qué clase de voz he puesto!? ¡Al final va a pensar que soy un idiota!

Haber llegado tan lejos para caer en un error tan tonto...

Pero Yuuma-chan me sonrió. Y entonces, me lo dijo claramente.

“¿Morirías por mí?”

......................

¿Eh...? ¿Qué fue eso?

“.........¿Eh? Eso es... ¿Cómo? Perdona, ¿me lo puedes repetir? Creo que he debido entender mal algo.”

Tenía que haber oído mal alguna cosa.

Eso es lo que pensaba. Tenía que ser eso. Así que le pregunté de nuevo.

Pero...

“¿Morirías por mí?”

Me lo dijo claramente otra vez, mientras se reía.

Sus palabras no tenían mucho sentido. Justo en el momento en el que estaba a punto de decir “Eres muy graciosa, Yuuma-chan” con una sonrisa forzada...

FLAP.

Unas alas negras aparecieron de su espalda.

Empezó a mover sus alas. Las plumas negras flotaron por el aire y luego cayeron a mis pies.

¿Eh? Era verdad que Yuuma-chan era tan guapa como un Ángel, pero...

¿Un Ángel? No, no había manera de que aquello fuera cierto.

¿Era algún tipo de actuación?

Mi preciosa novia estaba haciendo ondear sus alas mientras el sol se ponía a sus espaldas. Parecía algún tipo de escena de fantasía.

Pero era imposible que pudiera creer algo como eso.

Sus ojos, que hasta el momento habían sido cálidos y dulces, ahora habían cambiado a unos fríos y aterradores.

“Ha sido divertido el poco tiempo que he pasado contigo. Ha sido como jugar a las parejitas con un niño pequeño.”

La voz de Yuuma-chan se había vuelto muy fría. Su tono era como el de una mujer adulta y en su boca había una fría sonrisa.

BUZZ.

Se produjo un ruido mucho más alto que el de cualquier equipo de sonido.

Algo que estaba produciendo un zumbido atroz apareció en sus manos.

Era algo parecido a una lanza. Era como si estuviera desprendiendo una luz o algo...

En realidad, era una lanza.

Entonces, se escuchó el sonido del viento, seguido por un ruido asqueroso.

¡CHOF!

Cuando pensaba que algo me había tocado el estómago, miré y vi que la lanza que Yuuma-chan tenía en sus manos ahora me estaba atravesando el abdomen.

La lanzó contra mí...

¿Pero por qué? Intenté sacar la lanza, pero esta desapareció.

Lo único que quedaba era un agujero enorme en mi estómago y la sangre que salía de él. Sangraba. Sangraba mucho.

Empezaba a sentirme mareado y a tener la visión borrosa. Cuando quise darme cuenta, estaba tendido en el suelo después de que mis piernas se derrumbasen.

Escuché unos pasos que se acercaban hacia mí.

Alcancé a oír débilmente una voz. Era la de Yuuma-chan.

“Lo siento. Serías una molestia para nosotros, así que decidimos quitarte pronto del medio. Si quieres enfadarte con alguien, entonces odia a Dios por concederte uno de los Artefactos Sagrados.”

...Artefactos... ¿qué?

Ni siquiera pude preguntarle nada. Estaba tendido en el suelo cuando noté que sus pasos se alejaban de mí.

Al mismo tiempo, empecé a notar los ojos borrosos. El agujero en el estómago... tenía que ser mortal. No sentía ningún dolor.

Pero si me di cuenta de que estaba extremadamente grave fue porque noté que estaba a punto de perder la consciencia.

Sería genial perder la consciencia, pero si eso ocurría, moriría irremediablemente.

¿En serio? ¿Voy a morir a esta edad?

¡Ni siquiera he podido vivir la mitad de mi vida!

¿¡Cómo podría reírme si iba a morir atravesado por mi propia novia!?

Je... Mi consciencia comenzó a desvanecerse mientras yo estaba pensando en esas chorradas...

Sentí como si un montón de cosas estuvieran desapareciendo de mi interior...

Ah sí, me pregunto qué pasará mañana en clase.

¿Qué pensarán Matsuda y Motohama? ¿Llorarán por mí? Jaja, ni en cien años...

Mamá, papá... Nunca hice nada para daros las gracias por todo...

Joder... no va a ser nada divertido si encuentran las revistas porno que fui escondiendo por ahí cuando ya haya muerto.

¿Por qué sólo soy capaz de pensar en este tipo de cosas cuando me estoy muriendo...?

Las manos... aún puedo moverlas...

Me toqué el estómago y luego las puse delante de mí.

Era rojo... rojo carmesí. Era mi sangre. Toda la mano estaba roja. Todo eso era mi propia sangre.

Entonces me acordé de ella.

Lo que apareció en mi mente fue una chica.

La belleza con el pelo rojo brillante. Siempre que la veía, mis ojos se centraban en su pelo escarlata.

Si iba a morir, me habría gustado hacerlo en los brazos de una chica preciosa, como ella...

¿Estaría engañando a Yuuma-chan pensando de aquella manera? Espera un momento, si fue Yuuma-chan la que me mató...

Pero si estaba a punto de morir, quería haberlo hecho después de tocarle las tetas a Yuuma-chan...

Jaja, mis sueños de pervertido no se van ni aunque esté a punto de morir... Ah, cada vez lo veo todo más borroso...

¿Será este el final...?

Joder, he tenido una vida de mierda...

...Si pudiera renacer, me gustaría ser...

“Así que has sido tú quien me ha llamado.”

De repente, alguien apareció delante de mí y empezó a hablarme.

No podría saber quien era porque tenía la visión muy borrosa.

“Parece que vas a morir. Esa herida... Vaya, parece que está pasando algo interesante. Así que tú... es realmente interesante.”

Se estaba riendo como si hubiera encontrado algo divertido.

...Me pregunto qué es lo que le hará tanta gracia...

“Si vas a morir, entonces yo la tomaré. Tu vida, quiero decir. Vivirás para servirme.”

Antes de perder la consciencia, pude ver una melena rojo brillante delante de mí.

(1).- Juego de aventura conversacional erótico.

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